Calles convertidas en avenidas de agua en Errenteria

San Sebastián

Calles convertidas en ríos, bajos, garajes y negocios anegados. Es la imagen con la que despertaban este domingo los vecinos de Errenteria, una de las localidades más afectadas por las intensas lluvias.

Al desbordamiento del río Oiartzun en varios puntos - que ha alcanzado a varios coches aparcados en el barrio de Larzabal - se ha unido una red de alcantarillado que no daba abasto.  El resultado, calles céntricas como María de Lezo o Foru Plaza, convertidas en avenidas de agua, y los comercios de la zona, inundados.

La de este domingo ha sido una mañana de limpieza en la villa papelera. Hoy tocaba achicar agua y valorar pérdidas, con la mirada puesta en los seguros. Desde el pub Aker contaban a la SER que habían tenido que desalojar el local a las dos  de la madrugada por la cantidad de agua que estaba entrando: "No sólo entraba agua por la puerta, de lo que estaba lloviendo, es que también se filtraba por el suelo, salía por el baño... El colector no daba abasto, y se ha inundado todo".

Muy cerca del bar, en Rosmi, un comercio dedicado a la venta de ropa de trabajo, la foto era similar. Sus dueños se afanaban en retirar la ropa mojada y esperaban que el seguro se haga cargo, "aquí estamos achicando, recogiendo, contando y recontando, para presentarlo a los seguros", nos decían.

Les queda mucho trabajo todavía, pero parece que al menos en lo meteorológico la situación va a mejorar. En Gipuzkoa va a seguir lloviendo, aunque según Euskalmet, lo hará de forma más débil y menos persistente. Las cuencas de los ríos también van volviendo a la normalidad, después de que se hayan registrado hasta  141,3 litros por metro cuadrado desde las tres de la tarde de ayer hasta las diez de la mañana de este domingo en la estación de Eskas, en el entorno de Artikutza. Es el punto por cierto,  más húmedo y en el que más precipitación hay de toda la península.

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