Economia y negocios
Macrogranjas porcinas

La oposición a las macrogranjas sólo logra cambio de gobierno en Almendros

En Belinchón o Zarzuela los gobiernos municipales se han mantenido o incluso han mejorado sus resultados, ante la decepción de las plataformas

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Cuenca

La contestación social a las granjas porcinas sólo ha modificado los gobiernos municipales en una población de Cuenca, en Almendros.

En esta localidad, tras más de 30 años de gobierno del Partido Popular, las elecciones municipales las ha ganado el PIDA, el Partido Independiente Democrático de Almendros, con Elena Fernández a la cabeza, que será la primera mujer en la alcaldía del municipio.

La formación nació hace poco más de un año con la intención de luchar contra la instalación de la granja porcina.

En Belinchón, el popular Jesús López mantiene su gobierno y mejora los resultados de 2015. López, que aborda su tercer mandato, ha resaltado que lo que los vecinos respaldan es la gestión del gobierno, y que en el caso de la granja el Ayuntamiento ha actuado como debía.

En Zarzuela, el socialista Alicio Triguero también mantiene los cuatro concejales que tenía, aunque ahora la corporación la completa “Por un mundo más justo”, con una concejalía.

Triguero ha coincidido en que lo importante es la gestión municipal, y el servicio que le dan a los vecinos. Además, ha recordado que las elecciones no eran un “plebiscito” sobre la granja porcina.

Zarzuela era el único municipio de la provincia donde se ha presentado “Por un mundo más justo”. En un comunicado, esta formación ha aclarado que "ni el partido ni los miembros de M+J se han presentado a las elecciones de Zarzuela por estar ni a favor ni en contra del proyecto de la macrogranja, sino solo con el deseo de luchar y mejorar el municipio". "M+J defiende que, en el caso de llevarse a cabo el proyecto, se haga con la aprobación de todos los requerimientos legales necesarios (medioambientales, etc) y con la aprobación de sus vecinos. La concejala en Zarzuela del partido, Ana Belén Simón, velará por la legalidad del proyecto", añaden.

Entre las plataformas que se oponen a las macrogranjas porcinas en la provincia reconocen la decepción, ya que esperaban una mayor respuesta vecinal en las urnas, aunque creen que llegar a las instituciones es un primer paso.

“Serranía Limpia y Viva” o “Stop Macrogranjas. Pueblos vivos” han asegurado que seguirán trabajando para endurecer la normativa e impedir el vertido de purines, o que estas instalaciones pueda “espantar” al turismo del que viven varios pueblos cercanos a estas granjas.