Llamemos a la vulva por su nombre
El desconocimiento de la propia denominación de los genitales femeninos y sus partes es un indicador de la necesidad de educación sexual

Una manifestante muestra un cartel durante una protesta contra el sexismo en Munich (Alemania) / Alexander Pohl/NurPhoto via Getty Images

Fuenlabrada
“Hoy nos dedicaremos a ese territorio de la corporalidad de mujeres que solemos llamar genitales femeninos, aunque referirnos a ellos como vulvas sería una expresión más ajustada y precisa”, ha explicado Miriam Sobrino, matrona y sexóloga del Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles.
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Llamemos a la vulva por su nombre
Resulta curioso observar cómo acostumbramos a referirnos a esta zona de la anatomía femenina, desde vagina (que solo es una parte de la vulva) hasta eufemismos como “mis partes” o “ahí abajo”.
“Y no solo la manera de nombrar la vulva es confusa para algunas mujeres, también su imagen o representación aparece desdibujada, y posiblemente seríamos muchas quienes no acertaríamos a la hora de dibujar nuestros genitales. Seguramente muchos hombres tampoco”, resume Sobrino.
Vamos con el diccionario de términos al respecto.
La vulva sería “ese todo que tenemos entre las piernas, es decir, el conjunto de los genitales femeninos y que engloba: labios mayores y menores, clítoris, abertura vaginal y orificio uretral por donde sale la orina. Como vemos, en la vulva hay muchas cosas más aparte de la vagina”.
Resulta imprescindible explicitar que de la misma manera que no hay dos mujeres iguales, tampoco hay dos vulvas iguales. “La diversidad es la norma, en toda ella y cada una de las partes que la conforma, y esa variedad en tamaños, colores, volúmenes ni quitan ni ponen nada en las posibilidades que pueda ofrecer la vulva para la salud y la sexualidad de la mujer y su pareja. Aunque como en muchos territorios femeninos, aquí también parece haberse instalado el mandato de la “belleza” y cada vez más mujeres evalúan desde ahí sus genitales” se lamenta.
Los labios vaginales unos pliegues de piel que rodean la abertura vaginal. “Los labios mayores y más externos generalmente son carnosos y están cubiertos de vello púbico. Los labios menores son más internos y se extienden desde el capuchón del clítoris hasta debajo de la abertura vaginal. Los labios vaginales pueden ser cortos o largos, arrugados o lisos. A menudo, un labio es más largo que el otro. También varían en el color”, apunta.
El clítoris tiene una parte externa visible y palpable que se encuentra en la parte superior de la vulva, donde se juntan los labios menores. “Sin embargo, esta punta es solo el principio del clítoris, el resto se extiende hacia abajo a ambos lados de la vagina bajo los labios y mide aproximadamente 12 cm de largo. El clítoris se compone de un tejido esponjoso que se expande durante la excitación, como los labios vaginales y el pene en el hombre” ha explicado.
El orificio uretral es una pequeña abertura por donde se orina que está ubicada justo debajo del clítoris.
La abertura de la vagina se encuentra justo debajo del orificio uretral. “Lugar de paso, de salida y entrada: nacen los bebes, sale la menstruación, puede introducirse en ella dedos, penes, tampones y copas menstruales por ejemplo”, cuenta.
Las glándulas de Bartolino se encuentran a ambos lados de la abertura vaginal. “Liberan un líquido que lubrica la vagina durante la excitación sexual. A veces esta zona puede inflamarse y resultar dolorosa”, concluye.

David Sañudo
David Sañudo es el director y presentador de ‘Hoy por Hoy Madrid sur’ desde 2006; además es el responsable...




