Aprenda de Balears, señor Sánchez
De los presuntos socios del PSOE balear no ha quedado ni rastro, a cambio de recompensarlos con unas conselleries de lo más decorativo

"La línea roja" de Matías Vallés (10/07/19)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Palma
Se puede criticar con la ferocidad de ordenanza al PSOE balear, pero hasta sus enemigos más contrastados tienen que reconocerle que pacta Gobiernos como nadie.
No siempre se valora adecuadamente que Antich reuniera por dos veces hasta treinta votos de partidos tan dispares como UM o Izquierda Unida, contra un PP que contaba con 29.
Hace cuatro años, los negociadores de Armengol aterrorizaron a Més y Podemos, que sumaban más diputados que los socialistas.
Y en la legislatura recién iniciada, Armengol se ha llevado el premio de las negociaciones, la ruleta en que se tejieron, la mesa de juego y el casino entero.
De los presuntos socios del PSOE balear no ha quedado ni rastro, a cambio de recompensarlos con unas conselleries de lo más decorativo.
Por tanto, Pedro Sánchez tiene algo que aprender de una Armengol a la que odia amistosamente.
El ministro Ábalos felicitó el Pacto del Consolat asegurando que los cálculos no eran los mismos en La Moncloa.
Sin embargo, la última vez que miramos, al PSOE estatal le bastaba con el apoyo de Podemos logrado aquí a buen precio, más el silencio de una Esquerra Republicana más dócil que Més.
Si Sánchez desea gobernar, que tome ejemplo.




