Nuevo ataque de lobo en Serranillos: seis ovejas muertas, dos heridas y diez desaparecidas
La asociación agraria ASAJA lamenta que se dé mayor protección al cánido que a los ganaderos
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El ataque se produjo entre el martes y el miércoles / ASAJA
Ávila
El ataque tuvo lugar en la noche del martes al miércoles pasados. El presidente de ASAJA Ávila, Joaquín Antonio Pino, no comparte que el Ministerio de Transición Ecológica haya incluido a las poblaciones del lobo ibérico al sur del Duero, en Castilla y León, en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, y no tenga en cuenta las muertes que -diariamente- producen estos depredadores a la ganadería.
"Los ganaderos están alimentando a los lobos, mientras los políticos miran hacia otro lado, amparándose en el cumplimiento de lo dispuesto en la Directiva de Hábitats de la Unión Europea", suscribe Pino.
Aumentar el nivel de protección del lobo con la última Orden publicada en el BOE "entierra al ganadero en vida y da manga ancha al cánido al sur del Duero".
Según los servicios técnicos y periciales de ASAJA, en el último ejercicio cerrado correspondiente a 2018, los lobos mataron -en Ávila- alrededor de 2000 animales, principalmente terneros de menos de tres meses, ascendiendo las pérdidas reales a unos 5 millones de euros.
Para la organización agraria lo que necesita el medio rural es voluntad política y seriedad de todas las administraciones, algo que hasta el momento no está sucediendo en la parte política.
