Torrelavega sancionará a quienes incumplan la Ordenanza de terrazas
El concejal de Hacienda afirma que las sanciones empezarán una vez se acabe con el marcado de las terrazas
Torrelavega
Técnicos y operarios municipales están pintando estos días las marcas que delimitarán las terrazas de hostelería en Torrelavega. Del mismo modo, se están colocando las chapas fijas que acotarán el espacio que pueden ocupar las mesas y las sillas, de acuerdo a las licencias concedidas por el Ayuntamiento.
Según ha anunciado el concejal de Hacienda, Pedro Pérez Noriega, los establecimientos que incumplan la Ordenanza Municipal empezarán a ser sancionados una vez se termine con el marcado de las terrazas, ya sea por no respetar sus límites marcados o por instalar sus terrazas sin autorización.
Noriega ha advertido que el primer incumplimiento se saldará con una amonestación verbal, dando la oportunidad de rectificar al establecimiento. Sin embargo, la segunda infracción será sancionada económicamente con una suma que irá incrementándose con cada reincidencia.
El concejal admite que “la falta de personal” ha retrasado el marcado de las terrazas pero que la labor administrativa no ha cesado, destacando que “la mayoría de los establecimientos tienen sus resoluciones”, bien de concesión o de denegación.
Estas sanciones, en palabras de Noriega, no buscan “cerrar un establecimiento por la terraza, pero sí que los propietarios sepan que las sanciones pueden ser altas”, subrayando la subida de la cantidad económica en casos reincidentes.
Las primeras sanciones no tardarán en llegar, pues Noriega confirma que quedan “un 10 o 15% de terrazas por marcar”, principalmente aquellas fuera del centro urbano debido a “discrepancias” entre los hosteleros y los técnicos municipales. Por esto, “se está aprovechando para ver las terrazas que incumplen la Ordenanza” al tiempo que se realiza el marcado.
El problema de las terrazas en Torrelavega es más que evidente y su Ordenanza Reguladora fue nuevamente modificada el pasado mes de marzo, sin haberse cumplido dos años de su aprobación, debido a las presiones de hosteleros y de algunos grupos políticos.
Noriega ha destacado que las terrazas ya marcadas del centro urbano “se adaptan al cien por cien” a la normativa, aunque reconoce que no ocurre lo mismo en zonas “no tan transitadas”. El cumplimiento de la Ordenanza pretende hacer posible la convivencia de la actividad hostelera con el derecho de los peatones al uso del espacio público, especialmente el de aquellas personas con movilidad reducida.