India Martínez, cómo hemos cambiado
En la última década ha sido protagonista de la música española con su gran voz y la cadencia de sus canciones
Fuenlabrada
No es nada fácil concitar la atención de decenas de miles de personas únicamente por sonar por la radio. Es casi imposible. Pero a veces se produce la magia y uno de esos casos es el de India Martínez, cuya voz ha calado en un nutrido grupo de seguidores que se preparan ahora para escuchar su octavo disco, ‘Palmeras’, que ha adelantado con el single ‘Conmigo’. Vamos a retroceder al año 2004, hace no tanto, para escuchar la jovencísima pero poderosa voz de su primer disco.
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India Martínez, cómo hemos cambiado
‘Azulejos de lunares’ era el resultado de toda una corta vida de pasión por el flamenco, que cultiva desde chiquita y que antes de cumplir la mayoría de edad la había llevado por buena parte de Andalucía desplegando la fuerza de su cante. ‘Sobrellevé’ fue uno de los temas elegidos para su distribución. No era una obra personal ni propia, pero era una tarjeta de presentación discográfica inmejorable que evolucionó en su segundo disco.
En 2009 publicó ‘Despertar’, y eso es lo que supuso para su carrera, un despertar a nuevos sonidos, influencias musicales diversas y más control sobre su obra. ‘Anna’ fue el primer tema con el que se anunció el álbum y con el India demostraba que, aunque cultivaba un estilo complejo pero con decenas de artistas en la misma línea, podría ser capaz de ofrecer un hecho diferencial en su música. Algo que reconoció una doble nominación a los Grammy Latino. Pero su consagración llegó con un cambio de multinacional discográfica y un nuevo disco, ‘Trece verdades’, de 2011.
Ahora ya estábamos ante una de las grandes realidades de la música pop en nuestro país. Algo que se vio refrendado al año siguiente con un disco de oro y un año entero en la lista de los más vendidos gracias a temas como ‘Vencer al amor’. Su producción, sus letras, su música en definitiva se notaba mucho más elaborada y mejor montada. Similar éxito consiguió con su siguiente destino, ‘Otras verdades’.
En este caso no hubo que esperar ni un año para la nueva entrega de India Martínez, si bien buscaba aprovechar el tirón de su anterior LP con un disco de versiones donde destacó esta de Gloria Estefan, ‘Hoy’, que le venía de perlas a su idea de fusión sonora. No podía perder el tren de éxito que había cogido y por eso al siguiente año, 2013, publicó un nuevo trabajo original, ‘Camino de la buena suerte’, que presentó con ‘Los gatos no ladran’.
La receta se mantenía con temas pop aflamencados por la gran voz de India Martínez y cien por cien sentimentales. Algo que tenía acomodo perfecto en las radiofórmulas y que fijó un público fiel. Y eso se vio reflejado en las ventas, que mantuvieron el dorado en los discos que repartía, pero especialmente en su siguiente álbum, el cuarto en cuatro años, que llegó a ser platino doblando en ventas a los anteriores. Bajo el título ‘Dual’, Martínez reunía una colección de duetos como el ‘Olvidé respirar’ con David Bisbal.
También por esta época, sin duda la más exitosa de la cantante, gana el Goya a la mejor canción original gracias a la banda sonora de la película ‘El Niño’. El tema, interpretado por India junto al argelino Rachid Taha, fue compuesto por los vecinos de Valdemoro David Santisteban y Ricardo Rivera.
La avalancha de reconocimientos conseguía generar grandes expectativas en la carrera de la cordobesa. 2016 fue la fecha fijada para su séptimo disco, el penúltimo hasta la fecha, que tituló ‘Te cuento un secreto’ y donde explotaba la misma fórmula lenta donde el protagonismo absoluto era el de su voz y que defendió con temas como ‘Todo no es casualidad’.
Hemos llegado al final de este camino y antes de irnos pincharemos el single que precedió al anuncio del nuevo álbum y que desde hace unos meses avanzaba un pequeño cambio en el sonido de India, aumentando las cajas de ritmos, con base de reguetón y acento flamenco en fórmulas trap (aunque no busquen similitudes con la omnipresente Rosalía). ‘La gitana’ se llamó la canción y con ella quiere seguir teniendo presentes sus influencias sureñas.