Sociedad

El Gobierno regional destaca que "la vuelta a la normalidad tras la Dana pasa por establecer medidas estatales excepcionales que ayuden a los afectados"

Alcaldes de los municipios de Torre Pacheco, Los Alcázares, San Javier y Murcia, además del consejero de Fomento, buscan soluciones para que episodios de este tipo no se repitan

Murcia

También de carácter excepcional han hablado los alcaldes que han participado en el tercer panel, buscando soluciones a la DANA: Los Alcázares, Torre Pacheco, San Javier, Murcia, y el consejero de Fomento.

Mario Pérez Cervera, alcalde de Los Alcázares, la población más afectada por la DANA, que se repitió con más virulencia este año, ha recordado la magnitud de esta gota fría en su municipio: más de 1.000 rescates, más de 500 desplazados, miles de viviendas y comercios afectados, y ha destacado el impecable trabajo de los servicios de emergencia.

También ha resaltado el hecho de que se suspendieran las clases en los centros escolares durante esos dos días, que ayudó a reducir riesgos.

Torre Pacheco también fue un municipio muy afectado, que pide medidas para que no se repita. Dice su alcalde, Antonio León, que hay “un antes y un después” de este episodio y se demandan soluciones desde la ciudadanía. Entre esas soluciones, propone recuperar la red de drenajes naturales de la cuenca, reordenar cauces y ramblas, y apuesta por un urbanismo sostenible y riguroso.

El alcalde de San Javier, José Miguel Luengo, cree que a esta DANA de septiembre “ya se vino entrenado”, pues ha recordado los episodios de 2016 y 2018. Episodios que cada vez se dan con más frecuencia, causando el desánimo de la población.

Luengo ha asegurado que gracias al carácter cada vez más frecuente de lluvias de este tipo se aumentó un 35% el presupuesto de su municipio para emergencias, lo que ayudó a abordar la situación de riesgo extremo.

El alcalde de Murcia ha asegurado que la DANA fue de especial gravedad, y ha de servir “para concienciar de nuestra propia inacción, a fin de mejorar y no mirar con temor a las lluvias”. Entre las soluciones que aporta José Ballesta está el interceptor de pluviales, que en la zona norte del municipio recoja las aguas. “Es esencial”, dice Ballesta, que sitúa entre los problemas de este municipio el hecho de que las ramblas comienzan en montes de escasa vegetación y mucha erosión, y también porque el río Segura está en pendiente negativa en la ciudad y es la red de azarbes la que debe absorberlos, y no da de sí.

Ha cerrado las intervenciones el consejero de Fomento y comisionado del Gobierno regional para las inundaciones, José Ramón Díaz de Revenga, que ha asegurado que “la vuelta a la normalidad de los vecinos afectados por las inundaciones de septiembre pasa por establecer medidas estatales excepcionales que ayuden de verdad a los afectados que hayan sufrido daños en viviendas, comercios e instalaciones públicas”.

Según el consejero, “el actual decreto de subvenciones deja fuera las segundas residencias afectadas, así como los bajos, sótanos y garajes”, y ha destacado la “actuación impecable de coordinación de los efectivos y recursos” durante las inundaciones.

“Consideramos que hay que realizar obras de amplio espectro, basadas en soluciones sostenibles, innovadoras e integradoras” para evitar daños en caso de desbordamientos, explicó Díez de Revenga.

 
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