El crisantemo, la flor por excelencia en los cementerios en el día de Todos los Santos, simboliza la eternidad
Murcia
El crisantemo, la flor más utilizada en los cementerios con motivo del Día de Todos los Santos, especialmente, porque es en otoño cuando empiezan a florecer y durante estas fechas están en pleno apogeo, simboliza la eternidad.
Se trata de una flor de origen asiático, pero extendida por todo el mundo, con numerosas variaciones y colores. Y aunque se les asocia con la muerte, simbolizan la eternidad, la fidelidad, el optimismo, la sabiduría y la larga vida, aunque también depende del color.
Concretamente, el crisantemo amarillo simboliza el amor rechazado o el desprecio; el blanco, el fin de un amor o un dolor profundo, mientras que el rojo es la fuerte amistad.
El azul, significa una relación y superación rápida y el morado, simboliza una relación intensa. Por el contrario, el crisantemo rosa o naranja representa el amor frágil o el amor dulce.
Esta planta se caracteriza por ser resistente y muy fácil de cuidar, aunque prefiere la luz exterior, y es enemiga tanto del frío como el calor, por lo que necesita una temperatura intermedia.
Símbolo de este día son también la rosa, el tagete o clavel, que según la creencia mexicana tenía propiedades espirituales, además de la cala, dalia o el gladiolo; todas ellas flores resistentes y duraderas.