El Parlamento canario aprueba el primer presupuesto del Pacto de las Flores

Santa Cruz de Tenerife

El Pleno del Parlamento ha aprobado este jueves el proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de Canarias, unas cuentas acorazadas por los grupos que sustentan el Gobierno (PSOE, NC, Sí Podemos y ASG) y con los incombustibles votos en contra de la oposición (Coalición Canaria, Partido Popular y Ciudadanos).

Las primeras cuentas del bloque de centro-izquierda después de 26 años de gobiernos nacionalistas contemplan 8.066 millones de euros de gasto no financiero, un 2,7% más en el que tres de cada cuatro euros son destinados a políticas sociales (6.051 millones de euros).

Por áreas, Vivienda contará con 15,4 millones de euros (+19,5%), el Servicio Canario de Empleo con 38,7 millones (+16,5%), Transición Ecológica con 15,5 millones (+13,3%) y el Instituto Canario de la Igualdad (ICI) con más de un millón de euros (+10,01%).

Mientras, el Servicio Canario de la Salud (SCS) verá su presupuesto aumentado en 132 millones de euros (+4,4%), hasta un total de 3.138 millones; y Educación, Universidades, Cultura y Deportes subirá en 125 millones (+7,1%), para un total del 1.878 millones de presupuesto.

Asimismo, las políticas para Agricultura, Ganadería y Pesca crecerán en 10,3 millones de euros (+11,6%), las de Turismo, Industria y Comercio tendrán 7 millones más (+7,2%) y las de I+D+i 5,1 millones más (+11,5%).

Tras un mes y medio de análisis y debate, las más de 650 enmiendas parciales presentadas por el bloque de centro-derecha, que pretendían mover unos 300 millones de euros, han quedado reducidas a menos de una decena de concesiones. Entre ellas, las deducciones fiscales a las familias por gastos educativos, el reconocimiento de la carrera profesional del Servicio Canario de Salud o de los sexenios al profesorado. Las constantes negativas han suscitado la crispación en la oposición, especialmente entre Ciudadanos y el Partido Popular que han acusado al Gobierno de “pasar el rodillo”.

Por el contrario, el Pacto de las Flores ha blindado algo más de 180 enmiendas que pretenden “perfeccionar” los presupuestos y apuntalar el giro social. En este sentido, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha señalado que el Ejecutivo responde a dos emergencias, la climática y la social, por lo que las cuentas plantean una autonomía “mucho más equilibrada territorialmente y socialmente entre los que mas tienen y los que más necesitan".

La subida de impuestos planteada por el vicepresidente y consejero de Hacienda,  Román Rodríguez, y adoptada por el Gobierno, ha sido el eje transversal de las críticas de la oposición, que considera “irresponsable” la reforma impositiva dentro de un marco internacional inestable que augura una nueva crisis. La portavoz del grupo mixto, Vidina Espino, ha acusado al PSOE de “poner a sus 25 diputados para que gobiernen otros” y ha asegurado que Rodríguez “está obsesionado con el dinero de los canarios”.

No es el único reproche emitido durante más de siete horas de Pleno. El diputado del PP, Fernando Enseñat, ha apuntado que el Gobierno de Canarias “debería darse cuenta de que a nivel mundial vivimos una emergencia medioambiental, pero en Canarias lo que vivimos es una emergencia educativa y ustedes están mirando para otro lado”. Así ha definido las cantidades que destina la cartera de María José Guerra Palmero y que aún no alcanzan el 5% del PIB que indica la ley. A esto, el portavoz de CC, José Miguel Barragán, ha sumado que resultan insuficientes en materia de infraestructuras con los barracones de fondo: “presentan enmiendas y se bailan la mitad del presupuesto de canchas y techado”.

Las listas de esperas han generado otro de los grandes desencuentros entre el Ejecutivo y la oposición. El presidente ha señalado que estas han descendido, de media, de los 135 a los 124 días entre noviembre de 2018 y 2019, a lo que ha sumado su compromiso de que “comenzarán a publicar las listas mensualmente”. Es una justificación insuficiente para CC, PP y Cs, como lo son los 12 millones de euros que destina el Gobierno a su reducción.

Desde Coalición Canaria, Rosa Dávila ha calificado las actuaciones públicas y mediáticas del Gobierno como “una campaña para justificar los PGC” que no puede eludir el pago de “una cantidad estratosférica de 500 millones de euros en concepto de deuda”.

Es el discurso emitido ante la mirada indiferente y dirigida al teléfono móvil del vicepresidente y los ojos clavados en el reloj del presidente que han aplaudido y golpeado la bancada tras las palabras del socialista Iñaki Lavandera: “con estos presupuestos comienza un ciclo político más justo”.