Comienzo de año en pleno vuelo

Palma

El día que el Atlético Baleares pierda en casa, sentará incluso mal, porque el ser humano está diseñado para adaptarse al entorno, pero se adapta mejor a un entorno favorable. Otra victoria para posponer esa posible adaptación al aficionado baleárico.

La primera parte empezó de la manera en la que el equipo de Manix tiene acostumbrado al aficionado baleárico a sentarse a las 12:00h en el Estadi. Buen juego, movilidad, iniciativa y autoridad en un campo que no ha conocido derrota en lo que va de campaña.

Se inclinaba el campo a favor de los locales con el paso de los minutos, pasado el cuarto de hora, tras varios acercamientos tímidos, Gabarre tiraba cruzado un balón que se marchaba saludando al palo del Langreo. Pero curiosamente fue en el minuto 34 cuando una jugada del Langreo que no había tomado la batuta del partido, adelantó a los visitantes por mediación de Ramiro y la gente se movía un tanto inquieta con ese revés. No dio opción el Baleares a asentar ese 0-1 al Langreo porque Pedro Orfila, un minuto después conectó un cabezazo a la salida de un córner que se metió picado al fondo de la red. Veloz empate y factor susto apaciguado.

Un primer periodo en el que si iba a avistar otro gol más, el que permitió al equipo de Manix irse por delante en el marcador al descanso. A penas 5 minutos después Iturraspe conecta un balón suelto entre un jardín de jugadores de ambos equipos que se convierte en la ventaja. El susto inicial activó el carácter local y con el 2-1 se llegó al descanso.

El segundo acto comenzó con el gol que pondría la sentencia y el marcador final del encuentro, a gran parte de la grada le pilló tragando todavía el bocata del descanso. Un jugadón de Iturraspe que puso un buen pase para que David Haro se pusiera el traje de goleador y consiguiera el 3-1.

Tímidos acercamientos del Langreo que se quedó noqueado después del tempranero gol tras salir del vestuario que cortaba las esperanzas de meterse en el partido. En el 57 llegaba un remate de cabeza que hacía trabajar a Manu Herrera pero sin mayores apuros. Con una posesión de balón más dividida y un Baleares esperando a que el Langreo intentara coger el timón para venirse arriba en un contraataque, se fueron pasando los minutos.

David Haro se sintió cómodo con el balón en los pies y dejó jugadas en una buena actuación personal. Sin demasiada emoción se fue consumiendo el segundo acto, con la gente pendiente de lo que estaba haciendo el Atlético de Madrid B que también ganaba plácidamente por 3-0 su partido contra el Marino de Luanco.

Tres puntos más para la caja fuerte del Estadi Balear que sigue sin conceder una derrota, números increíbles en casa los de los blanquiazules y a pensar en el próximo compromiso liguero, que será contra Las Palmas B. Trabajo hecho y a dormir empatado a puntos con el líder.