Gran noche de coplas y ansiados regresos

Cádiz

‘La casa de papelillos’ recupera el nivel que demostraron en 2019 con ‘Los del piso de estudiantes dónde meto el elefante’. Caracterizados de los personajes de la serie televisiva pero al estilo chirigotero, con una escopeta hecha con una barra de salchichón y una lata de anchoas, se presentaba el repertorio de José Arauz y M. Ángel Llull. A pesar de que la afinación no estuvo de su parte, consiguieron mantener la sonrisa, algún que otro golpe y dos buenos pasodobles críticos podrían valerle a esta agrupación para reconquistar la fase de Cuartos de Final.

Musicalmente preciosa. Con la fuerza que se esperaba de ellos. Pero sobre todo, con la calidad de voces, la afinación y el repertorio completo en todos los aspectos de principio a fin, el coro ‘La Colonial’ no sólo defiende su primer premio sino que aspira a repertirlo.

El primer regreso de la noche llegaría en la tercera posición con ‘Los niños de la petróleo’. Con el pellizco inconfundible, su sello único que mantiene una sonrisa desde que se levanta hasta que se baja el telón. La picardía de ‘Sherif’ y ‘Lulu’ ha vuelto y, esperemos, que por mucho tiempo. De momento, en esta edición del concurso está garantizado que los veremos más veces.

Desde Chipiona venía la siguiente agrupación. Con buenas intenciones y demostrando trabajo y ensayo a la comparsa de David Reyes le sigue faltando algo para lograr el tan ansiado reto de llegar a Cuartos de Final. ‘El sueño gaditano’ no terminó de despuntar con un repertorio flojo en letras y que tampoco destacó en música y voces. Tendrán que seguir intentándolo el año que viene.

Se esperaba surrealismo y, al menos, cumplió con la expectativa. Tras un debut en el concurso bastante catastrófico, volvía a intentarlo el cuarteto de Córdoba con ‘Aquí no hace frío, hace humedad’ intentaron superarse a sí mismos y, aunque no seríamos capaces de decir si lo lograron, lo cierto es que al final del tema libre de las carcajadas del público ni siquiera se les oía. El respetable se divirtió mucho, las cosas como son. El nivel del repertorio tampoco tiene mucha discusión, aunque hay que reconocerles que seguramente ocupen una de las posiciones del listado de agrupaciones de preliminares que dejan huella, mala, pero huella.

En penúltimo lugar llegaba otra de las grandes esperadas. Los que fueran ‘El Chele Vara’ se subían a las tablas del Falla con el gran reto de asumir un proyecto sin la insustituible batuta de Juan de Carlos Aragón. Con ironía y ese aire canalla inconfundible se subieron a las tablas. Imposible no empaparse de la emoción que se notaba que sentían sus componentes pero que supieron disimular bien con las clásicas pose y estilo de una obra chirigotera de Aragón. Aunque dejaron el teatro un poco frío con un repertorio, de momento, algo plano, se les espera para la siguiente fase con las mismas ganas.

Cerraba sesión subiendo aún más el listón de la modalidad de comparsas ‘Los aislados’. La comparsa de ‘El Jona’ volvía este martes como autor y cumplió con las expectativas que se posicionaron sobre su proyecto. Náufragos en una isla llamada ‘Tolerancia’ esa es la apuesta de Jona para su año de regreso y lo mejor es que el repertorio completo defiende la idea con creces. Apunta alto y se cuela en todas las quinielas.