La Generalitat hace suyas las reivindicaciones del campo que afirma que la propia Generalitat no hace nada

Valencia

Las reivindicaciones del campo valenciano son las reivindicaciones del gobierno valenciano. Así lo ha dicho la consellera del ramo Mireia Mollà tras un encuentro con el sector después de la multitudinaria manifestación del viernes pasado. Sin embargo, el sector insiste en que todo son buenas palabras pero que faltan hechos.

Mireia Mollà se ha comprometido a tener pronto un calendario para pedir al gobierno de España más apoyo; para mejorar los seguros agrarios; para elaborar el reglamento de las elecciones en el campo pendientes desde hace años… Y por encima de todo reclamar a Europa que vuelva a sus orígenes. Que recupere el principio de preferencia comunitaria, hoy perdido.

Y como ya anunció el viernes en la SER para ello insiste en mostrar, por ley (con una iniciativa pionera en España), cuáles son los precios mínimos de referencia por debajo de los que se produce a pérdidas. Para que el consumidor lo sepa y se convierta en aliado del agricultor. Para poder pedir a Europa medidas de protección.

También ha comprometido que una parte de la nueva fiscalidad verde recaiga directamente en la agricultura. Pero desde el campo la sensación ha sido de “día de la marmota”. Ricardo Bayo de UPA, pedía concreción. Y Carles Peris de la Unió de Llauradors recordaba un largo rosario de promesas pendientes: el lobby valenciano para presionar en Europa, ayudas a los cítricos y nada de compensaciones por las políticas verdes, medidas fiscales directas para los agricultores…

La consellera, por su parte, insiste en que su capacidad es limitada y que sus políticas dependen de elementos como la Política Agraria Común en pleno proceso de cambio y del Plan de Desarrollo Regional, heredado del PP, y ya prácticamente sin fondos.