Jorge Díez Elorza, más que el escolta de Fernando Buesa
En el capítulo 17 de 'La Ventana de la Memoria', le recordamos con sus padres y compañeros Berrozis. Y la reflexión final de Txema Urkijo
LA VENTANA DE LA MEMORIA CAPÍTULO 17
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Bilbao
Este sábado 22 de febrero se cumplirán veinte años del doble asesinato del portavoz del PSE-EE en el Parlamento vasco, Fernando Buesa, y su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza, por ETA. 'La Ventana de la Memoria' dedica su decimoséptima entrega al joven berrozi. Sus padres, José Antonio Díez y Begoña Elorza le recuerdan como un joven muy deportista, amante del rock duro y que “intentaba siempre llegar a acuerdos, los conflictos no los llevaba muy lejos”.
Aunque su vocación era ser profesor de Educación Física, su nivel de euskera no le permitió acceder al IVEF, así que a la edad de veinte años, ingresó en la Ertzaintza. Fue de la última promoción de los 'Berrozis' y, como tal, sirvió de escolta del socialista Manolo Huertas; el alcalde de Laguardia, el popular Javier Sampedro; y finalmente Fernando Buesa.
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Pese a que el colectivo de ertzainas era objetivo de ETA y eran objeto de la hostilidad de el entorno radical, sus padres no vivieron su dedicación con angustia. Sí recuerdan cómo Jorge tuvo que dejar de ir con la cuadrilla del pueblo a Salvatierra, porque, desde que entró en la policía autónoma, “no le dejaban entrar en algunos bares, incluso le pegaron. Él no lo entendía, pero dejó de entrar por precaución”.
Sus padres recuerdan perfectamente el última día de la vida de Jorge. José Antonio se lo cruzó por la calle, en el centro de Vitoria, cuando él iba a comer y su hijo se dirigía a casa, a ver a su madre. Ya en el trabajo, José Antonio recibió la noticia por una llamada telefónica de su hija, a la que fue a buscar con el coche para dirigirse a casa. Begoña, sin embargo, estuvo viendo la tele en el sofá con Jorge hasta que este se despidió para ir a buscar a Fernando Buesa. Begoña se quedó adormilada frente al televisor hasta que Ana Rosa Quintana suspendió la programación para informar de un atentado en Vitoria. “Conocía a mi hijo por los zapatos”, recuerda. “Me volví loca, salí a la calle gritando ‘Es Jorge, es Jorge’, pero una pareja de la policía municipal no me dejó acceder y eso me ha remordido la conciencia desde entonces porque yo sé que todavía estaba vivo”.
‘La ventana de la Memoria’ aprovecha para recordar cómo vivían la amenaza de ETA los Berrozis, compañeros de Díez Elorza. Isabel León habla con dos ex escoltas, uno de ellos compañero del asesinado. Ellos recuerdan cómo “no podíamos decirles a los vecinos que éramos ertzainas, por nuestra familia, por si éramos víctimas de un ataque, no podíamos vivir en primeros pisos…”.
La reflexión final la firma Txema Urquijo, exdirector de Derechos Humanos del Gobierno vasco.