Las alamedas desaparecerán en breve de la Vega de Granada: en 20 años se ha perdido el 85% de los chopos
Un estudio de la Universidad asegura que el cultivo es rentable destinando esa madera a productos alternativos al plástico
Granada
Expertos universitarios dan la voz de alarma: las alamedas de la Vega de Granada desaparecerán en muy pocos años. En menos de lo que se esperaba. Los agricultores han dejado de plantar chopos por su escasa rentabilidad y las alamedas, paisaje lorquiano por excelencia, serán historia antes, incluso, de lo esperado. En los últimos 18 años, ha desaparecido el 85 por ciento de los árboles en este espacio.
La Universidad de Granada llama la atención sobre la total ausencia de planes para proteger este cultivo, importante no solo como paisaje (estechamente vinculado a la vida y a la obra de Federico García Lorca) sino, además, como pulmón de oxígeno en la que es, a día de hoy, la tercera área metropolitana más contaminada de toda España, solo por detrás de Madrid y Barcelona, como destaca el coordinador del estudio, Antonino Gallego.
La UGR ha elaborado un estudio, presentado este miércoles, que revela que las alamedas son rentables incluso económicamente aunque no como cultivo. Esta madera es una excelente alternativa al plástico.
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Destacan el chopo como herramienta contra el cambio climático. Pueden oxigenar otros cultivos, mejorar el microclima de la ciudad y resistir con más eficacia a incendios. Con una buena promoción de su transformación industrial, la madera de los chopos puede ser un excelente material para todo tipo de envases como alternativa al plástico. Solo es necesario apostar por esa industria, según el otro coordinador de la investigación, Javier de Teresa.