El temor al coronavirus vacía las estanterías de algún supermercado

Zamora

Actividad normal en la mayoría de los casos durante las primeras horas del miércoles en el sector de la alimentación en Zamora después de la situación que en la jornada del martes se dio en algún supermercado de desabastecimiento puntual de determinados productos, largas colas de clientes y estanterías vacías. Aun así en alguna de esas tiendas la imagen era la misma que se suele ver en la víspera de cualquier puente festivo, cuando coinciden dos días seguidos de cierre de los establecimientos, con una gran cantidad de clientes, falta de carros y productos que ya a media mañana comenzaban a escasear.

Supermercados que ayer tuvieron un volumen de ventas mucho mayor de lo normal en todos los casos, con muchos más pedidos y ventas online y, aunque se ha repuesto mercancía, en todas las tiendas se nota que el cliente se ha tirado sobre todo a por el papel higiénico, papel de cocina, arroz, legumbres, conservas, productos de limpieza y bandejas de carne, productos que en la mayoría de casos no faltaban en las estanterías aunque si se apreciaba un menor volumen de stock que, en algún caso concreto, desapareció en cuestión de minutos.

La situación es diversa dependiendo del número de clientes habituales de cada cadena: en algunas tiendas la mañana transcurrió tranquila sin mayor movimiento del habitual aunque en todas confirmaban que ayer fue un día de muchas ventas, en alguno de esos establecimientos de que hasta un 50% más de lo normal. No obstante los responsables de varios supermercados aseguraban que no habrá desabastecimiento aunque reconocen lo extraordinario de la situación.

En la tienda de Mercadona en las Tres Cruces, se registraba una gran afluencia de clientes desde primera hora y el personal confirmaba que el martes fue un día de locos con enormes colas y estanterías que quedaron arrasadas, más incluso que en navidad, decía una trabajadora, y aunque se repuso mercancía durante la noche lo cierto es que durante la mañana el stock de papel higiénico, de cocina o las bandejas de carne de pollo, pavo o filetes de lomo prácticamente se agotó.

Una alarma injustificada para la mayoría de clientes a pesar de lo cual y por si acaso, algunos si hacían compra arrastrados por la situación.