Las empresas instaladoras de Baleares reclaman que se paren las obras y atender sólo los casos urgentes

Palma

Las empresas instaladoras de Baleares: eléctricas, gas y fontatenería entre otras reclaman atender sólo los casos urgentes y que se paren las obras al no poder garantizar las medidas de seguridad para la contención del coronavirus. Señalan que en su mayoría son pequeñas empresas y autónomos que se sienten abandonados por el ejecutivo central.

Las empresas instaladoras de Baleares reclaman un poco de control y sentido común al estado central y es que afirman que mantener las obras debido a su tipología de trabajo es incompatible con mantener las medidas de seguridad e insostenible para cumplir plazos de entrega de obra.

Asegura el presidente de Asinem, Carlos Moya que se sienten desamparados "más del 80% de las empresas asociadas son autónomos o pequeñas pymes y pido a la administración que paren las obras y sólo dejen los servicios de emergencia y mantenimiento imprescindibles para que los servicios esenciales puedan seguir funcionando".

Moya asegura que no tienen los medios técnicos que pide sanidad como puedan ser mascarillas, guantes y desinfectante que se deben priorizar para la sanidad y servicios esenciales.

El presidente de los instaladores dice no entender que no se pare este canal de transmisión de coronavirus en las obras, por las personas que trabajan y cómo trabajan y el contacto con sus familias.