Morir en tiempos del coronavirus

Zaragoza

Los trabajos de las funerarias se han visto multiplicados. Sus oficinas no dan abasto. Las asociaciones de consumidores miran a este sector con especial atención. La UCA, por ejemplo, recuerda que las funerarias tienen que mantener los mismos precios que tenían antes del inicio del estado de alarma. El portavoz de esta entidad, José Ángel Oliván, en cualquier caso tranquiliza que "en Zaragoza apenas se han detectado abusos en los precios". Sí que hay más problemas con los seguros de decesos porque el decreto del Gobierno prohibe subida de precios y también los servicios que podríamos haber contratado y que ahora la funeraria no puede prestar.

Más testamentos

  La pandemia del Covid 19 y el miedo a este virus también ha provocado un aumento de peticiones para realizar testamentos. La abogada Pilar Bernad asegura que "son muchas las personas que han decidido dar este paso para dejar toda su herencia bien repartida y evitar conflictos familiares". Esta especialista advierte que "aunque los testamentos se pueden realizar sin notario, es importante contactar con un profesional para su redacción".

Los duelos se alargan

  Morir en estas circunstancias ha "robado" a muchas familias la posibilidad de decir adiós. Esta situación genera desaliento y, para los profesiones, no gestionarlo adecuadamente puede alargar el tiempo del duelo.

  Como apunta María José Ochoa, coordinadora del grupo de intervención de emergencias y catástrofes del Colegio de Psicólogos de Aragón, estas familias sienten que se les ha negado su derecho a la despedida y esto "exige una adaptación". Una opción, según Ochoa, es "anticiparnos a la situación final y hablar, hablar mucho". Se trata, añade, de "gestionar el duelo despidiéndonos en soledad para cuando esta situación termine, hacerlo con el resto de la familia, a través de una ceremonia o encuentro en común".