Conato de revuelta en Ocaña I por la falta de medios sanitarios
Los presos han protestado este jueves quemando contenedores tras sufrir un ataque epiléptico uno de los internos. Ha sido atendido en la enfermería del centro
Toledo
En la tarde de este Jueves Santo se ha producido un incidente en el centro penitenciario 'Ocaña I' de Toledo. Sobre las dos de la tarde una de las personas internas ha tenido que ser atendida tras sufrir lo que previsiblemente se trataba de un ataque epiléptico.
Fuentes consultadas por la Cadena SER han confirmado que los presos desde el patio han incendiado varios objetos como contenedores de plástico para protestar por la situación que se vive a diario, ya que aseguran que a esta cárcel solo acude el médico una vez a la semana.
Según estas fuentes, el interno que ha presentado este problema ha podido ser atendido en la enfermería del centro sin necesidad de tener que ser ingresado. La situación ha podido ser controlada por los funcionarios y personal de seguridad presente en el penal aunque el descontento de los internos es manifiesto.
Solo dos de los cinco médicos que hacen falta
La Relación de Puestos de Trabajo de este penal recoge cinco plazas de sanitarios, pero actualmente y desde hace ya tiempo no hay más que dos para la atención los 365 días del año, lo que se traduce en guardias localizadas como no puede ser de otra manera.
Ya en julio del año pasado la SER conoció la inquietud de los profesionales de los centros penitenciarios de Castilla-La Mancha, muy similar al del resto de España donde en tres años se ha reducido el total de la plantilla en un 40%. Entonces la portavoz de la Plataforma de Sanidad Penitenciaria, Carmen Hoyos, ya denunciaba que la gestión estaba siendo "absolutamente inadecuada".
1800 internos forman parte de los seis centros penitenciarios de la región, por lo que por ejemplo en verano a duras penas se pueden cubrir las bajas y las vacaciones de los facultativos que les atienden.