Las asociaciones de mayores reivindican permiso para un paseo, como los niños
La Federación que agrupa a los colectivos de personas de la tercera edad asegura que el cese de toda actividad tendrá consecuencias en la salud de miles de asturianos confinados

Las asociaciones de mayores se conformarían con una salida diaria de 15 minutos. Por ahora, seguirá prohibido. / Ricardo Rubio (Europa Press)

Oviedo
“Un paseín de un cuarto de hora, con protección y sin relación social”. Es la demanda de la Federación Asturiana de Personas Mayores (FAMPA) para las personas de edad avanzada y sanas. Ahora que se ha determinado que los niños puedan salir a partir del día 26, la FAMPA llama la atención sobre los perjuicios para la salud que la falta de movilidad derivada del confinamiento supone para las personas mayores.
El confinamiento es duro para todas las personas. Mucho se ha venido hablando de los niños, que podrán salir acompañados durante unos minutos a partir del día 26. Se habla menos de los problemas de las personas mayores confinadas, si bien hay abundantes testimonios de algunas de ellas que sufren, no solo la falta de ejercicio, imprescindible para mantener el tono físico, sino también la soledad. Muchas de estas personas viven solas y en espacios muy reducidos. Ahora que se empieza a hablar de la relajación de algunas de las medidas del confinamiento, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Mayores del Principado de Asturias (FAMPA), Dolores San Martín, pide que se les permita dos cosas: el paseo y el huerto.
San Martín reconoce que uno de los peores efectos del confinamiento es la agudización de la soledad, uno de los problemas más extendidos en una población con un elevado porcentaje de personas, sobre todo, mujeres, que viven solas.
La FAMPA está ayudando a personas de edad avanzada y con problemas de movilidad a realizar la compra una o dos veces por semana. Lo hacen a través de voluntarios de la FAMPA.




