"No habremos acabado con el coronavirus hasta que también lo hagamos en África"

Canarias

Mientras en España, y en Canarias en concreto, comienza ya a trabajarse en la desescalada que permitirá recuperar cierta normalidad tras el paso del COVID19, en otros lugares del mundo empiezan a enfrentarse a la pandemia. Es el caso de África donde en este continente con algo más de 1.300 millones de habitantes, actualmente y con cifras oficiales, se registran 22.800 infectados y 1.144 fallecidos por coronavirus.

En el continente negro observan cómo con la adopción de medidas de confinamiento tempranas la expansión del COVID19 se acelera lentamente. Lo cuenta desde Senegal para La Ventana de Canarias, el periodista de El País, José Naranjo. Esta región del África occidental, en Estado de Emergencia y con toque de queda nocturno desde el pasado 20 de marzo cuando contabilizaban 78 contagiados por el virus de Wuhan, no es de las más afectadas por la pandemia. No así Sudáfrica, Egipto, Marruecos o Argelia. "Estos cuatro países concentran la mitad de los positivos en coronavirus de África, pero se da la circunstancia de que son los que tienen un sistema de salud relativamente fuerte. Lo que preocupa son los que no lo tienen como es el caso de Burkina Faso o el Congo", cuenta Naranjo.

La política de confinamiento se mantiene prácticamente en toda África salvo en Ghana, donde el pasado domingo se levantaba la orden de quedarse en casa. Son estas restricciones tomadas a mediados de marzo las que, según Naranjo, han hecho contener el avance del virus evitando que los casos importados se generalizaran y dándole "tiempo a prepararse" pasando de tener dos laboratorios habilitados antes de la pandemia para realizar los test a 48 en la actualidad.

Sin embargo, esta cuarentena también está teniendo otras consecuencias como la "escasez, la subida de precios, e inestabilidad social". La alta dependencia de África del exterior en cuanto a las exportaciones de materias primas y su pobreza en cuanto a comercio interior van a suponer un "impacto durísimo" en el continente, asevera. "No le puedes decir a alguien que sale cada día a buscarse sus alimentos que se quede en casa tres semanas", puntualiza el periodista. Por eso insiste en que es fundamental que "África refuerce sus lazos comerciales porque su dependencia con el exterior la hace más débil a estas situaciones de crisis".

Para combatir al coronavirus África cuenta con amplia experiencia en el control de otras pandemias como el ébola, la malaria o el sarampión. Recuerda el también Premio Canarias de la Comunicación 2016 que esto permite que haya una mayor implicación con agentes de salud comunitarios. "La escasez de material sanitario que presenta África se está supliendo con esta red que permite una detección precoz de casos y alertar a las autoridades". Esto para Naranjo es síntoma de que África también se protege más aún cuando "tienen el chip de lavarse continuamente las manos e incluso de usar mascarillas como ya hacen en Senegal".

¿Cómo se enfrentará África al día después del COVID19? Naranjo lo tiene claro. "Es una crisis global y no se puede dejar atrás a los más vulnerables y África necesita ayuda" ya que, según recuerda, "harán falta unos 100.000 millones de dólares" para que el continente haga frente "al primer impacto" de esta emergencia sanitaria y social.

Desde África, continente del que nos separan escasos 100 kilómetros, han llegado a Canarias 550 personas a bordo de pateras o cayucos durante el Estado de Alarma y con las fronteras cerradas. Naranjo espera que las secuelas sociales y económicas que deje el coronavirus en el continente vecino no supongan un motivo añadido para migrar. "Quiero pensar que no se va a dejar a ninguna región atrás y que esta epidemia se quedará en algo residual", afirma mientras insiste en que "las migraciones son un problema estructural y un fenómeno natural que requieren la sabiduría para gestionarlas adecuadamente, y no con represión y violencia".