¿Es lo peor que va a pasarnos?
Y en efecto, la tentación derrotista avanza que el virus no es la culminación de un desastre, sino el preludio de catástrofes posteriores
"La línea roja" de Matías Vallés (22/04/20)
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Palma
Por extraño que parezca, hay personas que me adelantan en juventud.
En estos tiempos, los algo más jóvenes te plantean con aprensión: “¿Es esto lo más grave que ha ocurrido en nuestras vidas?”
Lo preguntan confiando en que puedas consolarles con la constatación de que la zozobra fue más asfixiante tras la muerte de Franco, con el golpe del 23F o tras la caída de las Torres Gemelas.
Por supuesto, el confinamiento por la pandemia supera en gravedad a esos acontecimientos.
Sin embargo, el formato de la pregunta incluye el tono optimista de que si “esto es lo más grave que nos ha pasado”, entonces ya no habrá sobresaltos de igual magnitud en los años próximos.
Porque para preservar nuestro estado de ánimo,en estos días omitimos la pregunta clave:
¿Es esto lo peor que va a pasarnos?
Y en efecto, la tentación derrotista avanza que el virus no es la culminación de un desastre, sino el preludio de catástrofes posteriores.
A tal efecto, solo puedo repetir la respuesta del geógrafo Jared Diamond a Iñaki Gabilondo:
“El coronavirus puede matar a un dos por ciento de la población mundial, el cambio climático puede acabar con la humanidad entera”.
