El informe que la Comunidad no quiso escuchar: Madrid no tiene material ni camas UCI suficientes
La SER accede al informe de Yolanda Fuentes, directora general de Salud Pública que dimitió este jueves, en el que aseguro que "no es recomendable cambiar de fase"
Madrid
"En estos momentos evaluando los datos disponibles, no es recomendable cambiar de fase". Es la expresión que la entonces directora de Salud Pública de Madrid, Yolanda Fuentes, hizo llegar a través de un informe al Gobierno regional para frenar la petición de pase a la fase 1. En el documento, al que ha accedido la SER, Fuentes esgrime numerosas razones para desaconsejar el cambio. La ya exdirectora, que presentó su dimisión este jueves tras negarse a firmar el documento con el que la Comunidad pedía al Gobierno central comenzar la desescalada, señala su preocupación por la incapacidad para garantizar la asisentencia en caso de un repunte.
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A lo largo de 28 páginas fechadas el día 5 de mayo, la máxima responsable sanitaria a nivel técnico ha cuatro razones para no dar ese salto, es lo que etiquetó como 'limitaciones añadidas para iniciar el desconfinamiento'.
La primera, Madrid carece de recursos humanos suficientes en salud pública "para la vigilancia epidemiológica", tampoco hay "personal de refuerzo en atención primaria para el seguimiento de pacientes en aislamiento domiciliario". Pero es que Madrid ni siquiera "ha desarrollado aún un sistema de información de vigilancia epidemiológica para dar contestación a los indicadores establecidos por el Ministerio". Eso puso por escrito Yolanda Fuentes en su informe donde también alertó que en estos momento en Madrid "no está garantizado el sumistro de equipos de protección". Pero hay más, la exdirectora de Salud Pública alertó que en Madrid faltan camas de UCI, "hay más pacientes ingresados que camas disponibles".
En este informe se aportan todo tipo de graficas y de mapas de riesgo que acreditan que en la actualidad en Madrid existe "una circulación moderada de casos secundarios que se están generando en las familias, entre el personal sanitario y en las residenicas". La exdirectora general de Salud Pública avisa que en Madrid sigue produciendo "un número de casos diagnosticados por PCR que es superior a 100, además, el número de casos posibles que se están en cuarentnea superan los 1.000 al día".
Aun así, tanto el consejero de Sanidad, como la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso desoyó esas recomendaciones. El Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso decidió solicitar el cambio de fase el pasado miércoles. La decisión costó varias horas distribuidas en dos reuniones del ejecutivo y que explicitaron las diferencias internas. La presidenta se levantó de la reunión del Consejo de Gobierno donde se debatía este asunto; la decisión se pospuso a la tarde. Después de que, esa misma mañana, Ayuso sugiriera en Radio Nacional que todavía habría que aumentar el número de camas UCI disponibles para pedir pasar a la fase 1, su Ejecutivo acordó lo contrario en contra de la opinión de los expertos que le asesoran.
Al día siguiente se produjo la dimisión de Yolanda Fuentes, cuyo informe estaba sobre la mesa de Ayuso desde el martes, porque se negaba a dar luz verde a una decisión que los indicadores sanitarios desaconsejaban. El Gobierno regional buscó tapar la marcha con el nombramiento de Antonio Zapatero, quien estuvo al frente del Hospital de Ifema, y aseguró que no había hablado con Fuentes en los últimos días. Finalmente, la Comunidad envió al Gobierno central un informe que carecía de firma en la noche del jueves.
"El sistema sanitario estaba colapsado"
Yolanda Fuentes reconoce en el informe que la pandemia hizo saltar todas las costuras del sistema sanitario madrileño. El 25 de febrero Madrid identificó el primer caso importado de COVID-19, solo un mes después -el 27 de marzo- los hospitales de la región estaban a rebosar de pacientes. Ese día se alcanzó el pico de la pandemia: se confirmaron 3.744 nuevos casos en la región y el número de infectados acumulados llegaba a 27.272. "En este momento el sistema sanitario estaba colapsado", reconoce la ya exdirectora general. Un aviso insuficiente para disuadir a sus jefes políticos.
Madrid diseñó una simulación para frenar la pandemia
La direcció de Saud Publica hizo una simulación para estudiar qué pasaría en función del tipo de desescalada que se haga en Madrid. Ese pronóstico está diseñado sobre el hipotético escenario que podría darse hasta el 19 de junio.
Se hicieron dos modelos de desconfinamiento gradual, en uno de ellos tuvieron en cuenta que hay una "epidemia oculta", es decir, que "hay mucha población que está infectada de forma asintomática y no ha sido detectada por el sistema de salud". En este caso concreto se concluye que independientemente del grado de desconfinamiento que se haga "se produciría una remontada de casos diarios".
La segunda proyección es el que se proyecta qué pasaría si en esa desescalada gradual "se incorporan las de pruebas diagnósticas - PCR en la población no infectada durante el desconfinamiento". El resultado es claro: "se frenaría la epidemia", zanja.
Javier Bañuelos
Redactor Jefe en la Cadena SER responsable de la información sobre Interior y Defensa. Antes trabajé...