"Lo importante es abrir y dar vida a Gijón", dice la hostelería

Gijón

La actividad hostelera toma impulso en Asturias con los avances de la activación de la fase 2 de la desescalada. En el sector hay mucha incertidumbre por el futuro, pero también ganas de luchar ante un reto mayúsculo. 

Jamás imaginaron que tendrían que permanecer dos meses con la persiana bajada y otro mes y medio más de propina (al menos), con una desescalada que, en la mayoría de los casos, no resulta del todo rentable. Pero como explica Herminio Suárez, gerente del Restaurante Ciudadela de Gijón, el sector necesita echar a andar aunque sea al ralentí. 

Las características y particularidades de cada uno motivaron que, durante la primera fase, gran parte de los dueños de bares optara por no subir la persiana, ya que sólo podían apoyarse en sus terrazas. El Café del Parchís lleva dos semanas ensayando una vuelta gradual y cautelosa a la normalidad. Su propietario, Alfonso Villalta, afirma que la clientela "cumple".

La patronal turística Otea ha iniciado una campaña de promoción de los establecimientos hosteleros asturianos en redes sociales con la etiqueta #LaMateriaQueNosUne con la que el sector agradece la confianza de los clientes para retomar la actividad hacia la nueva normalidad. A través de Facebook, recuerdan que nunca perdieron la confianza en recuperar el pulso de su actividad profesional y confían en que se llenen de vida de nuevo las terrazas, los comedores y las habitaciones de los establecimientos.