El dilema

Córdoba

No sé si conocen el clásico juego llamado “El dilema del prisionero”. Durante años se ha utilizado para estudiar las conductas que podríamos llamar “egoístas” y “altruistas” y los beneficios que se derivan de ellas. Simplificando, la cooperación es la respuesta más beneficiosa pero requiere renunciar a la posibilidad de obtener un beneficio mayor propio. Y este es el dilema del día a día, decidir si somos “altruistas” y cooperamos, a pesar de las conductas “egoístas” que encontramos en las calles, oímos en las radios y televisiones, o leemos en la prensa y en las redes sociales

El confinamiento, en muchos de nosotros ha generado un sentimiento de generosidad y compromiso con los sistemas públicos, los grupos cívicos de ayuda y el medioambiente. El Ingreso Mínimo Vital que hoy se aprueba puede asegurar una red de protección económica a las familias que ya sufrían exclusión social, a quienes se han incorporado y a los que desgraciadamente irán cayendo en esta situación en los próximos tiempos. La experiencia me dice que se han erradicado enfermedades y mejorado la sociedad desde la cooperación. Sería triste, ¿no creen?, que no siguiéramos en esa línea, en un momento tan difícil y con un futuro tan incierto.