El amaño del Plan General de Alicante: algo olerá siempre a podrido
El "más difícil todavía", como todo lo que envuelve a Ortiz, pasa por su acuerdo con la Fiscalía, reconociendo que había doblado la voluntad de los exalcaldes para conseguir la revisión del PGOU y su posterior, y sorprendente o no, rectificación
La Columna de Carlos Arcaya: «El amaño del Plan General de Alicante: algo olerá siempre a podrido» | 30/06/2020
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Alicante
Esta mañana tiene lugar la primera sesión del juicio por el amaño del Plan General de Alicante, que sienta en el banquillo de los acusados a dos exalcaldes de Alicante, Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo, y al empresario Enrique Ortiz, entre otros.
La imagen es elocuente. Con esta larga amistad entre Luis y Enrique, comenzó todo.
No obstante, en lo judicial, el asunto no puede estar más rodeado de incertidumbres para las acusaciones. Tras la sentencia de otra sección de la Audiencia Provincial que anuló las escuchas, la prueba angular para la acusación por las supuestas irregularidades en la contrata de basuras de Orihuela. Sin embargo, esta otra sección ha avalado las escuchas en otros juicios.
Pero, como dirían en el circo, el "más difícil todavía", como todo lo que envuelve a Ortiz, pasa por su acuerdo con la Fiscalía, reconociendo que había doblado la voluntad de los exalcaldes para conseguir la revisión del Plan General y su posterior, y sorprendente o no, rectificación.
Además, hay que recordar que a la cita con el Juzgado, en defensa de los acusados, van a acudir notables penalistas.
Ya hay quien sostiene que el caso tiene sentencia y no puede ser otra que la absolutoria. Sea lo que sea, como escribió Shakespeare en Hamlet, algo olerá siempre a podrido. No en Dinamarca.
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