"Si por cuestiones de salud no se puede celebrar la Feria, no se celebrará", avisa Barbón
El plan de contingencia limita a 14.000 el número de asistentes que pueden confluir de forma simultánea en el recinto

Uno de los pasillos de la Feria. / Ser Gijón

Gijón
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha subrayado que la propuesta para la celebración de la Feria Internacional de Muestras será analizada "con rigor" dentro de los criterios de salud pública, de modo que "si no se puede celebrar, no se celebrará".
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Adrián Barbón, pte Principado, Feria de Muestras coronavirus
El plan presentado por la Cámara de Comercio de Gijón para celebrar la feria con un aforo limitado deberá ser analizado por el grupo técnico constituido por el Principado junto con la Delegación del Gobierno y la Federación Asturiana de Concejos (FACC) para decidir sobre su autorización. Este grupo técnico también deberá establecer "los requisitos, si es que hubiera feria, dentro de los criterios de salud pública", ha dicho Barbón en una entrevista con Cope, en la que ha remarcado que la decisión se adoptará "con rigor".
El plan de contingencia presentado por la Cámara de Comercio de Gijón para celebrar la FIDMA del 1 al 16 de agosto próximos plantea hacer obligatorio el uso de mascarillas y limitar a 14.000 el número de asistentes que pueden confluir de forma simultánea en un recinto por el que han pasado en las últimas ediciones del certamen más de 700.000 personas en quince días.
Además, contempla que el uso de la mascarilla sea obligatorio en el interior y en el exterior de los pabellones y se recomendará la compra de entradas por internet mientras que, para adquirirlas en taquilla, habrá que respetar los espacios habilitados para formar colas y las marcas que indicarán la distancia de seguridad.
El plan, que será analizado esta semana por el comité de desescalada constituido por el Principado, la Delegación del Gobierno y la Federación Asturiana de Concejos y cuya autorización corresponderá a la Consejería de Sanidad, prevé tomar la temperatura a diario a los trabajadores y aislar temporalmente a la persona afectada ante posibles casos de COVID-19.




