Adrián Barbón confía en que los escándalos de Juan Carlos I no socaven la reputación de la Fundación Princesa

Gijón

El presidente del Principado es partidario de que Juan Carlos I responda ante la ley. Sin embargo, confía en que los escándalos financieros del anterior jefe de Estado no repercutan en la reputación de la Fundación Princesa de Asturias. Adrián Barbón avaló en SER GIJÓN una fiscalidad específica y coyuntural para reducir el déficit público disparado por la crisis sanitaria, aunque puntualizó que la medida no afectaría de forma particular a esta comunidad autónoma, donde ya existe un tributo asociado a la sanidad. Insistió en que seguirá adoptando decisiones por duras que sean para proteger a los asturianos y que recurrirá a la Justicia para ordenar confinamientos colectivos si fuera necesario.

Barbón confía en que la Fundación Princesa de Asturias, uno de los grandes activos de la región, salga indemne de los escándalos financieros de Juan Carlos Primero. El presidente, en una entrevista en Hoy por Hoy Gijón, se mostró partidario de que el anterior jefe de Estado responda ante la ley, pero cree que no socavará el prestigio de la institución por muy vinculada que esté a la Monarquía.

Por otra parte, aunque su principal reivindicación en materia tributaria sigue siendo la armonización fiscal para evitar la competencia desleal entre comunidades autónomas, el presidente considera oprtuno incorporar a la reforma fiscal un recargo temporal del IRPF para reducir el déficit público que se acumuló con rapidez para hacer frente a los gastos derivados de la pandemia ya los efectos devastadores que está teniendo en la economía. Sin embargo, matiza que es poco probable que esa medida afecte a Asturias, donde hay un impuesto específico destinado a la Sanidad.

Por otra parte confía en que la Fundación Princesa de Asturias, uno de los grandes activos de la región, salga indemne de los escándalos financieros de Juan Carlos Primero. El presidente es partidario de que el anterior jefe de Estado responda ante la ley, pero cree que no socavará el prestigio de la institución por muy vinculada que esté a la Monarquía.

Barbón sigue dispuesto a tomar decisiones tan duras como la suspensión de la Feria de Muestras, con un impacto económico de 100 millones de euros. Y también a acudir a los Tribunales cuando crea necesario un confinamiento colectivo para frenar la epidemia. Entretanto, propone convivir con el virus con la máxima prudencia para evitar un retroceso que sería catastrófico para la salud y la economía.