La alcaldesa de A Coruña advierte que la estatua de Millán Astray no se moverá
"Nadie está por encima de la ley", señala Inés Rey
Informará la petición a la Justicia por si constituye una ilegalidad
Inés Rey atiende a los medios / Concello da Coruña (Archivo)
A Coruña
La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, ha replicado este sábado al Gobierno de Ceuta que "nadie está por encima de la ley", tras recibir la petición formal para la cesión de la estatua de Millán Astray que fue retirada en 2010 de la plaza herculina, ahora denominada Praza das Atochas, y que, en la actualidad, permanece en una dependencia municipal.
El Ayuntamiento coruñés no solo impedirá el traslado de esta estatua, sino que pondrá en conocimiento de la Justicia lo que, remarca, parece una vulneración de la Ley de Memoria Histórica, por la que "los escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación personal o colectiva del levantamiento militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura, deberán ser retiradas de los edificios y espacios públicos".
El gobierno coruñés ha recordado al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta que la Ley de Memoria Histórica es "igual para todos".
"Si la estatua de Millán Astray fue retirada de nuestra ciudad, de ningún modo se le va a ceder a ninguna otra administración para su exhibición. Desde el gobierno local de A Coruña defendemos la aplicación de la Ley de Memoria Histórica y cualquier otra administración que piense que está por encima de la ley está equivocada", ha avisado.
"Reparar la memoria histórica"
La regidora asegura que no es el único caso para "reparar la memoria histórica" de la ciudad, y ha recordado "el expolio de los bienes públicos" llevado a cabo en la ciudad por la dictadura franquista, como es el caso de la Casa Cornide, por la que "el Ayuntamiento de A Coruña sigue luchando para que se le devuelva a los coruñeses lo que es suyo".
También ha recordado que el Ayuntamiento coruñés fue parte de la denuncia que recientemente se resolvió de forma favorable a que los herederos del dictador Francisco Franco devolvieran el Pazo de Meirás.
