Conocemos la Bearman Xtreme con Moi Vidal
Acaba de volver de los Pirineos Franceses en la que ha quedado en segundo lugar en este triatlón extremo que solo en la carrera a pie tiene un desnivel de 1.300 metros positivos
Forajidos. Entrevista a Moisés Vidal tras participar en la Bearman Xtreme
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Alicante
Moisés Vidal es un pionero del triatlón. Comenzó a competir hace 18 años y a sus 45 años de edad ya ha finalizado una veintena de Ironman. Por ello su conocimiento nos sirve para saber cómo ha evolucionado -en todos los sentidos- este joven deporte.
En varias ocasiones, los 3,8 kilómetros a nado, los 180 kilómetros en bici y los 42 kilómetros corriendo los ha terminado por debajo de las nueve horas. Un registro que solo está al alcance de los mejores. Y para ello, lo reconoce, entrena disciplinadamente a lo largo de la semana. Como ejemplo, durante el confinamiento, entrenaba unas 20 horas a la semana en el rodillo y en la cinta.
Desde hace algún tiempo compatibiliza el triatlón con las ultradistancias en montaña, una disciplina a la que se enganchó tras participar en la Costa Blanca Trail.
Su último reto ha sido competir en la Bearman Xtreme. Se trata de una prueba de supervivencia (no hay avituallamientos) que se celebró el pasado 19 de septiembre y que partió de Les Lacs de SaintJean-Pla de Corts. Segundo puesto, tras un corredor local, con un tiempo de 12 horas 8 minutos y 44 segundos. Le sacó casi 9 horas al último corredor que entro en la meta.
La prueba comienza en este lago a las 6:30 horas de la mañana por lo que los participantes deben usar una luz que se coloca dentro del gorro de natación. Afortunamente, afirma Moi, el agua no estaba muy fría pese a que el lago se encuentra en plenos Pirineos Franceses.
Tras la transición comienzan los 180 kilómetros en bici con un desnivel positivo de 4.000 metros. Los participantes recorren estrechas carretas de montaña. Y para finalizar, tras calzarse las zapatillas, los supervivientes han iniciado la maratón que en este caso cuenta con un desnivel de 1.300 metros y con la meta instalada en Amélie les Bains.
Se trata de una de las carreras más extremas del mundo.
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