El transfondo religioso y político del Concilio de Aranda

Aranda de Duero

Sobradamente es conocida la historia de Aranda por todos sus habitantes. Y también que en 1473 se celebró en la capital ribereña el Concilio de Aranda, que anualmente es muy bien representado. Pero, ¿nos hemos preguntado alguna vez sobre su relevancia, su transfondo? Hoy hemos salido de dudas con el historiador burgalés Fernando Sánchez.

Porque, ¿fue tan importante el Concilio? "Fue de una importancia singular. Aquí la iglesia y lo político iba unido. La idea del obispo Alfonso Carrillo era buscarse un lugar privilegiado de lo que en ese momento era Castilla y posteriormente España, con Isabel la Católica. Uno de cada cuatro españoles era eclesiástico, y no por vocación. El Concilio quería romper con la Edad Media y abrir las puertas a la Edad Moderna, combatiendo la ignorancia y la vida disipada de algunos clérigos. Esto ocurre entre noviembre y diciembre. Unos escribanos del rey dan testimonio de que Isabel, entones princesa, sale a recibir al Obispo Carrillo", explica Sánchez.

¿Y se cumplieron los propósitos en esta transición hacia la época moderna? "Sí pero poco a poco. Desde 1473 hasta 1492 que es cuando se toma Granada, ahí sí que da un vuelco brutal la historia. Pero sí que es cierto que la vida eclesiástica se limpió, y este fue un poco uno de los gérmenes", afirma.

Y es que la relación de la reina Isabel con Aranda, como ya comentamos hace unos meses, era excepcional. Y se mantuvo cuando ella se marchó. "Con Aranda como tal el resto de relación hasta la muerte de la reina es de un cariño afectivo pero sobre todo epistolar, hay mucha correspondencia entre la reina y el Ayuntamiento. Había arandinos que se ponían directamente en contacto con la reina para hacer algunas modificaciones en vez de seguir los trámites habituales. Aranda siempre ha estado marcada como una zona de realengo. Aranda y la Casa Trastámara están terriblemente unidas", sentencia Sánchez.

La charla al completo puede reproducirse en el siguiente audio.