El Mallorca continúa con su racha ante un Zaragoza en caída libre (0-0)

Los jugadores del RCD Mallorca lamentan una ocasión perdida en La Romareda. / LaLiga

Palma
El Real Mallorca, tras empatar sin goles en La Romareda contra el Real Zaragoza, continúa con su gran racha, que asciende a nueve jornadas sin perder, y deja al conjunto aragonés en caída libre, con cuatro jornadas consecutivas sin marcar y con su entrenador en el alambre.
El conjunto insular supo aprovechar lo que ya es una constante, la debilidad del conjunto zaragozano en este inicio de temporada, y especialmente en una Romareda vacía que abrasa a un equipo local que, vista su trayectoria, tiene que comenzar a mirar hacia abajo más que hacia arriba, como era su intención primera.
De hecho, el empate, aunque tiene dos encuentros por disputar (Girona y Almería), podría suponerle entrar en descenso en esta jornada. Para ello bastaría con que el Logroñés o el Castellón consiguieran ganar en uno de sus respectivos encuentros.
Ambos equipos disputaron un partido áspero, difícil de tragar y con poca fluidez.
La primera parte tuvo un juego atascado y escasas oportunidades, con un equipo local más centrado en defender que en atacar pero que curiosamente fue el único que tuvo opciones de marcar, aunque no llegó a conseguirlo, y una segunda similar pero con un Mallorca que fue el único que pudo marcar en dos buenas oportunidades.
Ante los problemas que venía sufriendo el conjunto maño optó por intentar mostrarse sólido atrás ante un Mallorca que tuvo más el balón.
Sin embargo, los visitantes, a pesar de amasar el balón y pisar casi permanentemente campo zaragocista, en ningún momento obligaron a intervenir al meta argentino local, Cristian Álvarez.
Por contra, el equipo de Rubén Baraja superó unos minutos iniciales en los que fue a remolque del equipo balear y en los que vio cómo a los visitantes sólo les faltó haber filtrado algún buen balón en las cercanías del área.
Tras ello cerró bien los caminos a su área y el equipo de Luis García Plaza ya no fue capaz de dar la misma sensación de peligro que en los minutos iniciales. Por contra, los "blanquillos'' fueron los únicos que pudieron haber inaugurado el marcador con dos buenas oportunidades en los minutos 20 y 36, en la primera ocasión con un remate de Pep Chavarría desde la corona del área que atajó Manolo Reina y en la segunda con un centro raso del propio Chavarría al que no llegó por muy poco el "Toro" Fernández.
Tras el tiempo de descanso el juego no varió sustancialmente si bien lo que sí cambió fue que se intensificó el dominio foráneo y, a diferencia de lo ocurrido en el primer periodo, el equipo de Rubén Bajara no fue capaz de pisar el área rival con peligro y se limitó a defenderse porque no daba más de sí.
Jordi Mboula, a poco de ingresar en el terreno de juego, en el minuto 64, tuvo una gran opción en una jugada individual en la que envió el balón por encima del larguero.
El equipo aragonés se disolvía como un azucarillo en un vaso de agua porque no aguantaba físicamente y el conjunto bermellón se dio cuenta y buscó la victoria. La tuvo otra vez en el 80 con un disparo de Abdón Prats en el corazón del área que paró con el pecho el meta argentino Cristian Álvarez que salvo a los suyos de la derrota.




