Aira, la perra que ayudar a combatir el estrés del personal sanitario que lucha contra el COVID-19
Se trata de un programa pionero en España que utiliza los canes como elemento de la terapia psicológica
Óscar Bueno, gerente asociación Entrecanes
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Asturias
El personal sanitario que lucha contra el COVID-19 ha visto como sus jornadas se han multiplicado además de cancelar permisos, licencias así como excedencias, permisos sin sueldo y disfrute de horas sindicales. El aumento de la presión asistencial provoca cansancio y desgaste no solo físico, también psicológico y emocional. Por ello la asociación Entrecanes ha puesto en marcha un proyecto, pionero en España, donde se ayuda al personal sanitario a través de una terapia asistida por perros. Ocho años después de los comienzos, ha desarrollado "un taller de ocho horas en cuatro sesiones con ejercicios, dinámicas, técnicas para la reducción del estrés, gestión emocional y el autocuidado", explica su gerente, Óscar Bueno.
Aira descansando en el césped. / Ser Gijón
Dirigido específicamente para los sanitarios que han luchado y siguen peleando contra la pandemia con el objetivo de "mejorar su bienestar emocional". ¿Qué razón lleva a utilizar perros en una terapia? "Hay diferentes posibilidades en las cuales ayuda. Diferentes estudios demuestran que la propia interacción entre el perro y la persona reduce las hormonas que intervienen en el estrés. Además, el hecho de participar en un contexto terapéutico es un elemento novedoso y crea un clima muy positivo y favorable que nos ayuda a focalizar. Luego introducirlo en esas actividades que se van a realizar nos ayuda a que sea más ameno".
Aira durante la sesión con personal sanitario. / Ser Gijón
La encargada de tutelar el taller es Aira, "una perra veterana", asegura Bueno. "En función del desarrollo del taller, si tenemos una sesión más movida podríamos cambiar pero, en principio, seguramente imparta Aira las ocho horas". La asociación posee 13 canes de distintas edades, razas, tamaños y características. "Tenemos de todo porque cada perro tiene su personalidad. Algunos están más agusto con determinados colectivos y podemos ir variando en función de las necesidades de cada proyecto y el bienestar animal", apunta. Por ahora la respuesta está siendo positiva. "A los participantes les sorpende y les gusta la presencia del perro. La terapia es efectiva y no es nada estrambótico porque se trata de hacer lo que hace un psicólogo pero tiene el plus de la presencia del perro", aclara.
Las actuales restricciones en Asturias con la limitación del grupos a seis personas y reducción de horarios complican la tarea de una asocación que viene de unos meses complicados. Su segmento de trabajo eran colegios, residencias de ancianos y centros de discapacidad; lugares a los que no han vuelto desde el pasado mes de marzo. "Nosotros dábamos servicio en más de 30 centros y entendemos que nuestra actividad es segura. Se desarrolla bajo estrictos protocolos pero el clima ahora mismo es el que es y está costando poder retomar proyectos o incluso sumar alguno nuevo", apunta y recuerda que "ya había necesidad antes de la pandemia pero las precauciones actuales son muchas. Estamos en ese debate entre la necesidad y la seguridad por las circunstancias tan excepcionales que vivimos".
La información sobre los talleres está disponible en la web de la asociación (www.entrecanes.org) así como en sus redes sociales.
Josu Alonso
En la actualidad cubre información política aunque, con anterioridad, ha pasado por todos los departamento...
