Los empresarios de A Coruña piden que se rebajen los impuestos en función de su bajada de actividad
Fontenla señala que hay sectores que llegan a una caída global del cien al ochenta por ciento
Antonio Fontenla / Radio Coruña
A Coruña
La Confederación de empresarios pide a los Concellos de la provincia que rebajen el Impuesto de actividades Económicas para acomodarlo a la bajada de actividad de las empresas. Su Presidente, Antonio Fontenla, explica que estamos asistiendo a una paralización de la actividad económica que llega al ochenta por ciento en el conjunto del año en algunos sectores.
Fontenla explica que hay sectores enteros paralizados como la hostelería, las agencias de viajes o los hoteles y debe haber soluciones para que puedan mantenerse hasta que termine esta situación de pandemia: "Es que a parte de este impuesto, este señor que ha estado parado no produce basura así que no debería pagarlo, en un momento en que se quiere ayudar a las empresas, si se les asfixia no es posible que puedan permanecer".
Hace un llamamiento a Xunta, Diputación y Concello para que se apoyen los proyectos de inversión a través de los fondos europeos, claves para salir de la crisis. Señala que los créditos ICO y las ayudas tardan en llegar. Explica que hay otras áreas de actividad que están viéndose paralizadas de forma colateral. No se hacen por ejemplo trajes de novia porque no se celebran bodas ni grandes celebraciones.
"Esto es como un tsunami, muchos nos quedaremos por el camino"
Los empresarios de locales de ocio nocturno ven cada vez más negro su futuro. Con sus negocios cerrados desde el 7 de marzo, salvo el paréntesis de julio con importantes restricciones de aforo, señalan que su capacidad de resistencia se está agotando. Su propio colchón económico en muchos casos está al límite.
El pago del alquiler de los locales y de los recibos, sumado a la tardanza en la llegada de las ayudas públicas que alivien su situación, hacen inviable la continuidad de sus negocios. Iván Flashback, dueño de El Milagro y La Cúpula, describe su situación como un tsunami: "Hay muchísima gente que se va o nos vamos a quedar por el camino, siempre intento mantener el ánimo pero tal y como se están sucediendo las ayudas veo muy complicado que buena parte de la hostelería vaya a salir de esta".
Iván considera que las ayudas llegarán en muchos casos tarde. Reclama por ello agilidad en su tramitación y menos burocracia. La crisis económica de esta pandemia así lo exige.
