Paradynski se pone la capa de superhéroe en Peñíscola

Murcia

Partido de dificultades el que se encontró ElPozo Murcia en Peñíscola. Volvió la película de siempre: control y posesión del equipo charcutero, muchas ocasiones, pero poco acierto de cara a puerta. La buena actuación de Molina en la portería local tampoco ayudó.

En los primeros minutos se le cedió la batuta a los de Murcia con un juego absorbente, pero la efectividad se impuso para que Peñíscola abriese el luminoso en el minuto tres con una diana de Igor. La respuesta era tardía, Giustozzi trazaba el plan para agujerear la meta rival, pero Molina, en sendos disparos de Fernando y Darío, evitaba el empate ante la ansiedad, de nuevo latente de un equipo al que le cuesta finalizar como tónica general.

Un balón al palo del propio Darío en el 13 avistó la esperanza de un equipo murciano con presión muy alta, pero donde los de Castellón se sacudían con solvencia gracias a Walex. Ni con una quinta falta de los locales a seis minutos del descanso pudo remar hacia las tablas porque, cuando más apretó ElPozo, Gomes hizo el 2-0.

Se pudo aferrar, sin embargo, el equipo dirigido por Giustozzi a un acercamiento con un doble penalti que ejecutó Paradynski. Con todo abierto unos segundos antes del descanso, la segunda parte siguió un guion similar en el inicio.

Más mordida murciana con Paradynski en el minuto tres, un balón al palo y Molina impidiendo hasta el empate en una triple parada. Volvieron los nervios, solo mitigados por un Miguelín que por jerarquía empujó lo que pudo para sumar experiencia hasta que llegó otra bofetada local. Nadie salió al paso de un Igor en el minuto 11 que chutó fortísimo para batir a Juanjo. Esta vez la respuesta fue notoria y ElPozo se vino arriba buscando la meta sin descanso.

Ni un minuto tardó Rafa Santos en poner el 3-2 y Giustozzi puso de portero jugador a Marcel para crear más peligro y abrir espacios. Funcionó la estrategia porque el propio brasileño metió el cuerpo en la red de Molina con dos minutos para el final del partido y los murcianos se pusieron con cinco faltas cargadas.

La buena noticia es que Peñíscola no lo aprovechó, pero sí ElPozo. Paradynski logró la épica a 35 segundos del final. El brasileño se sacó un zapatazo que celebró con rabia por lo que suponía tras una remontada sufrida en un equipo que tuvo muchísimas ocasiones y que afortunadamente pudo materializar.