Varios viajeros sin causa justificada llegan a Ibiza en el primer día de cierre perimetral

Ibiza

La isla de Ibiza ya está cerrada perimetralmente y se nota en la actividad de la terminal ibicenca, en la que apenas operan este sábado una docena de vuelos, entre salidas y llegadas. En todos los casos se trata de conexiones nacionales o interislas, que han transportado muy pocos pasajeros.

Desde este sábado solo se permiten los viajes por causa justificada, por motivos de trabajo o estudios, asistencia a mayores, menores o personas dependientes o por cuestiones médicas.

La terminal ibicenca se ha blindado y solo pueden acceder a ella viajeros con tarjeta de embarque y el documento que acredite el motivo del viaje. También quienes aterrizan en la isla deben presentar un justificante, aunque durante la primera jornada, los efectivos de la Guardia Civil encargados del control de pasajeros, han realizado una labor informativa. Sí han permitido el paso a quienes no han podido justificar el motivo de su desplazamiento o lo hacían por causas no contempladas en el Decreto de Estado de Alarma. Las sanciones se interpondrán a partir de este domingo.

Algunos de esos pasajeros han detallado que no poseían documento alguno y que venían a la isla para visitas de carácter personal, pero los propios agentes les han dicho que "para otra vez ya lo sabéis" y les han permitido el paso informándoles del cierre perimetral y asegurando que "a partir de mañana sí que pondrán multas".

También se han instalado controles de la Benemérita en el Puerto de Ibiza para controlar a los viajeros que llegan a la isla en barco. El cierre perimetral se mantendrá, en principio, hasta el día 30 de enero.