Ildefonso Hernández: "Para una desescalada importante hemos de bajar la incidencia por debajo de 200 casos"

Alicante

La prórroga de las medidas restrictivas para hacer frente a la pandemia hasta el próximo 1 de marzo darán paso, si se mantiene esta bajada de la curva de contagios, a una desescalada lenta y gradual tal y como aseguraba esta semana el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.

La incidencia acumulada continua descendiendo en la Comunitat Valenciana, actualmente se sitúa en 690 casos por cada 100.000 habitantes, y según los expertos, para iniciar una desescalada importante esa cifra debe ser inferior a 200 casos.

El Catedrático de Salud Pública de la UMH, portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública y miembro del grupo de expertos que asesoran al president de la Generalitat Valenciana, Ildefonso Hernández explica que la prórroga de estas medidas era necesaria por varios motivos: hay que consolidar la bajada hasta incidencias más bajas, la aparición de nuevas variantes y que el sistema sanitario vuelva a tener capacidad para asumir todas sus funciones. "Además, si conseguimos una incidencia baja después podremos manejar la vacunación de una forma mejor".

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Sobre la aparición esta semana de la variante sudafricana en Elche, Hernández declara que "quizás lo más preocupante es que puede escapar algo de las vacunas de AstraZeneca aunque hay que esperar". Por ello, reclama el refuerzo de los sistemas de vigilancia epidemiológica.

Añade, no obstante, que a partir del 1 de marzo se pueden plantear algunas medidas de relajación en función de los impactos sanitarios, sociales y económicos. Las más sencillas, y por lo tanto, más fáciles de cambiar son las que realizan al aire libre. En este sentido, una de ellas podría ser la de levantar la limitación de reuniones de dos personas en la vía pública. Eso sí, considera que todavía es prematuro y apuesta por analizar detalladamente la información epidemiológica durante estas dos semanas para tomar las mejores decisiones.

Sobre la apertura de la hostelería, Hernández considera que las terrazas son la mejor solución y admite que la buena climatología a partir de marzo puede ayudar porque recuerda que en interiores "el riesgo aumenta mucho".

A pesar de ello, señala que se debe reforzar las cuestiones de distancia en las terrazas ya que, a pesar de estar al aire libre, se juntan personas de grupos de no convivientes y sin mascarilla, un sitio ideal para la transmisión, explica. Siempre que sea posible, se deberían doblar las mesas o aumentar su tamaño.

Ildefonso Hernández asegura que "si aplicamos un esfuerzo por parte de todos, es posible que las cosas puedan ir a mejor y podamos relajar antes esas medidas".