Recibe el alta tras 315 días ingresada por COVID-19: "Lo pasé muy mal, este virus hay que tomárselo en serio"

Asturias

Elsa Lomas, asturiana de 52 años, vive en Madrid y desde el pasado 7 de abril ha estado ingresada en el Hospital Gregorio Marañón afectada por el coronavirus. Ahora ya descansa en su casa, junto a su familia, y celebrará este miércoles su 53 cumpleaños. Sin embargo, su llegada a la meta no ha sido fácil. Su situación era tan compleja y fue agravando progresivamente de tal forma que a los 15 días de llegar al hospital precisó su ingreso en una Unidad de Cuidados Intensivos. Allí permaneció hasta el mes de septiembre, la mayor parte del tiempo sedada, con ventilación mecánica y durante un mes en ECMO, un sistema de Oxigenación por Membrana Extracorpórea, que la permitió respirar. Esta paciente ha estado en una situación muy grave por complicaciones derivadas del COVID-19 y las patologías previas que padecía, un linfoma no Hodgkin. Ha sufrido un infarto cerebral y distintas infecciones.

En una declaraciones distribuidas por el hospital, Elsa ha asegurado que le parece "un milagro" haber salido del virus. "Me han pasado muchas cosas. Ahora es el presente y hay que tirara para adelante", ha asegurado. Visiblemente emocionada, su salida ha estado acompañada de los aplausos de algunos de los 300 profesionales sanitarios que se han encargado de sus cuidados durante todo este tiempo. "Es un mal sueño del que se puede salir porque vida solo hay una", ha dicho Elsa en un mensaje esperanzador pero también ha advertido: "Hay que tomársela en serio (la pandemia) porque cada vez hay más casos". 

Junto a ella, su marido y su hermana; en casa le espera su hija, Eva. "El proceso ha sido muy duro para todos. Ha sido una enfermedad muy cruel porque no tienes la posiblidad de recibir visitas", ha apuntado Esther. Sin embargo, también ha reconocido estar sorprendida porque, aunque a Elsa le queda una larga recuperación, las cosas han salido bien; algo que achaca a tres factores. "La fuerza que ha tenido para salir adelante, el hospital que no ha escatimado en medios y la ayuda de Dios ha sido la puntilla final", ha relatado.

Para ayudar a Elsa en su recuperación, el Hospital Gregorio Marañón cuenta con el Programa de Atención a Pacientes COVID Post-UCI, en el que recibe atención multidisciplinar de los servicios de Medicina Interna, Neumología, Rehabilitación, Endocrinología, Psiquiatría, Enfermedades Infecciosas, Geriatría, Unidad de Cuidados Intensivos y Anestesia y Reanimación, Cardiología y enfermería para atender las necesidades físicas y psicológicas derivadas de un ingreso tan prolongado en la UCI, con un abordaje personalizado y dando continuidad asistencial a todo el proceso clínico del pacientes.