Una décima parte del ozono en Navarra se debe a emisiones propias
Las condiciones climáticas y las masas de aire están detrás de buena parte de los niveles de ozono registrados en Navarra
El tráfico rodado es el principal contribuyente entre los factores propios
Pamplona
El 90 % de las emisiones de ozono detectadas en Navarra y que afectan a la Comunidad foral se debe a “inductores que vienen de fuera” y solo el 10 % está generado en Navarra, siendo el principal responsable el tráfico rodado en la zona de la comarca de Pamplona.
Esta es una de las conclusiones del estudio sobre la contaminación por ozono en Navarra realizado por el departamento de Medio Ambiente y Desarrollo Rural en el que, además, se plantea que aunque “el impacto local sea limitado” se planteará la reducción de emisiones asociadas al tráfico rodado, ha avanzado la consejera Itziar Gómez.
La consejera y el director del Servicio de Economía Circular y Cambio Climático, Pedro Zuazo, han precisado que en Navarra “se cumple con los niveles de emisiones de ozono” pero, a pesar de ello se ha querido realizar un estudio que irá acompañado de la redacción de un plan de mejora de la calidad del aire en Navarra.
Este plan, ha avanzado la consejera, buscará “optimizar recursos para minimizar la contaminación y sus consecuencias para el medio ambiente”.
Zuazo ha señalado que las emisiones por ozono son un “tema con complejidad” y que el 90 % de emisiones de ozono procedentes de otras regiones, de las que “Navarra no es responsable y no hay capacidad de actuación”, lleva a pensar actuaciones “estatales y no solo locales, y también a nivel europeo”.
A nivel estatal se incumplen los niveles “desde el Valle del Ebro hasta el sur”, mientras que en la franja norte se cumple el valor objetivo, “aunque no el valor a largo plazo, que únicamente se cumple en pequeñas franjas de esta zona”.
En Navarra incide “la importación de ozono de otras latitudes, no solo de regiones cercanas, sino desde Francia o Gran Bretaña”, ha apuntado Zuazo, quien ha señalado que “en ocasiones estos fenómenos son relevantes”.
Las situaciones de viento sur “son las que más contribuyen a la presencia y la situación de concentración de ozono más elevada” en Navarra, ha añadido.
Ha precisado que “con la capacidad de Navarra de reducir emisiones de ozono se reduciría muy poco la totalidad de los niveles que respiramos”.
Aunque en Navarra se cumplen esos niveles “en los últimos tres años”, la OMS señala que el nivel de emisiones de ozono se incumple “prácticamente en toda Europa y más de 95 % de la población europea está sometida a niveles superiores a los recomendados”.
Además, este contaminante no es “emitido, sino que se forma a partir de otros precursores de su formación”, lo que complica su estudio y también la adopción de medidas eficaces.
Al respecto Zuazo ha señalado que “se observa que todos los planes de actuación que se hacen a nivel europeo desde hace dos décadas no están provocando una reducción de niveles de ozono tan importante como lo esperado”. “No hay un conocimiento suficientemente grande de esta cuestión”, ha resumido.
Sin embargo, ha señalado que en zonas urbanas “los niveles de ozono son menores que en las rurales, que es cuando el ozono adquiere mayores concentraciones” y que se explica, sobre todo, por “las emisiones de óxido de nitrógeno, que reducen la presencia de ozono”.
A pesar de ello, ha señalado que en la formación de emisiones de ozono “la mayor aportación autóctona es el centro de la aglomeración de la comarca de Pamplona, donde se produce una cantidad mayor de emisiones por el tráfico rodado como mayor contribuyente.
En 2021 se avanzará a partir del diagnóstico y se estudiarán “cuáles son las posibilidades de mejora en la elaboración del plan de acción en calidad del aire” y se revisará la disposición de la red de control, que quedará conformada por tres zonas: Sur, comarca de Pamplona y la Zona Media y Norte se integrarán en una sola.
Por último, y como recomendación surgida del estudio, se planteará instalar más estaciones de medición en la Comarca de Pamplona.