Históricos en apuros en Segunda B
El Deportivo quiere evitar ser incluido en la lista de ilustres en horas bajas tras el final de la primera fase de la categoría
A Coruña
El final de la primera fase deja ya varias conclusiones importantes. Son varios los equipos históricos que se han llevado un batacazo contundente. El Deportivo intentará, con lo que pueda lograr ante el Zamora y con lo que ocurra en otros campos, ser uno de esos trasatlánticos que naufrague. De los recién descendisos del fútbol profesional, sólo el Extremadura tiene opciones de volver. Rácing de Santander y Numancia jugarán por estar en Primera Federación.
En el grupo de los gallegos, sin ir más lejos, el Pontevedra, que a principios de temporada aspiraba al ascenso, luchará por no descender a la Tercera Federación. Lo hará independientemente de lo que consiga en la última jornada del próximo domingo. La victoria del Rácing de Ferrol certifica un descenso automático a Segunda Federación para los de Luisito. Un equipo con jugadores de caché como Charles o Rufo.
En el subgrupo 1B, el Numancia de Soria, que descendió al igual que el Deportivo del fútbol profesional el pasado curso, no podrá optar al ascenso y optará por jugar en la Liga PRO o por descender. Le ocurre lo mismo al Rácing de Santander, otro de los equipos que emprendió el camino desde Segunda a Segunda B. Los de El Sardinero acabaron sin opciones de volver este año a Segunda a pesar de que aún tienen que jugar la última jornada.
También fue sonado el fracaso del Hércules de Carmelo del Pozo. El ex director deportivo blanquiazul no pudo capitanear al equipo alicantino a la senda de luchar por el ascenso a pesar de las expectativas del verano. Acaban cuartos en su grupo tras encadenar derrotas consecutivas. La prensa local en Alicante habla de riesgo de desaparición en caso de no conseguir jugar la próxima Segunda B PRO. Peor lo tiene el histórico Recreativo de Huelva, que acabó octavo y luchará por no descender a la Tercera Federación. Misma situación vivió el Marbella, uno de los proyectos económicamente más potentes y que tendrá que evitar el descalabro de jugar la quinta categoría nacional.
El que logró el billete, y con cierta holgura, es el Extremadura del coruñés Manuel Mosquera. Tras una temporada en la que fue despedido por malos resultados, y reclutado de nuevo, el Extremadura sumó cuatro triunfos seguidos para colocarse segundos y hacer soñar a Almendralejo con volver a Segunda.