Silencio en el marcador
La LFP prohibe informar en los videomarcadores en otros campos durante las jornadas unificadas
El marcador de San Mamés en la última jornada de liga / Radio Bilbao
Bilbao
Es lo habitual desde hace ya años. La LFP prohíbe, durante los partidos de las jornadas unificadas, que se informe de lo que pasa en otros campos. Algo que, por otra parte, no deja de ser absurdo en la vorágine tecnológica que vivimos.
Si a la vez que se prohíbe informar por los videomarcadores, se prohibiese también el uso de teléfonos móviles, tablets y ordenadores portátiles, esa medida tendría algún sentido. ¿O es que alguien se cree que los equipos no saben lo que están haciendo sus rivales? Aquella imagen del banquillo, apiñados alrededor de un transistor, ha quedado totalmente obsloleta.
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Que en días así no juegue el marcador le quita salsa al fútbol, y más cuando “había” público. El ¡ohhh! de la grada por aquellos goles, que mandaban a un equipo a segunda o le hacían a otro campeón, desapareció para dejar paso a al tímido rum-rum de los que se enteraban por el transistor.
En esta ocasión, contra el Real Madrid en San Mamés no hubo público pero tampoco se informó. Los escudos de Athletic y Real Madrid, los goles y el cronometro, nada más. Lo único que explica el apagón informativo en el luminoso es que los jugadores no se vean afectados en su juego. Pero seguro que para cuando el marcador quisiera anunciarlo, el banquillo ya se habría “chivado”.
