Alba, la azafata a la que rechazaron en Fitur por tener una talla 46: "No tengo ningún problema con mi cuerpo"
Alba Nevado, de 22 años, fue contratada por una agencia de eventos para ser azafata; pero la rechazaron después de contratarla porque no tenían uniforme de su talla. Nos lo ha contado en La Ventana de Madrid
"La agencia me ofreció volver utilizando un traje negro y en el puesto de información porque, como hay un mostrador, no se vería tanto que llevo un uniforme distinto a mis compañeros. Dije que rotundamente no"
Entrevista a Alba Nevado, azafata de Fitur a la que han rechazado por su talla
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Madrid
Alba Nevado tiene 22 y una talla 46. Una agencia de eventos, Best Way, la contrató para ejercer como azafata en Fitur estos días; pero al llegar allí se encontró con que la rechazaban porque no tenían uniforme de su talla. Llorando, contó su experiencia en su perfil de Instagram y se viralizó. Este viernes la hemos escuchado en La Ventana de Madrid reivindicar cómo en su día a día no tiene ningún problema con su peso.
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"Sobre todo cuando era más pequeña, sí que se habían metido con mi físico y eso condicionó mucho la forma de verme a sí misma", ha contado Alba. En el ámbito profesional, nunca se había encontrado con lo que le ha sucedido en Fitur. Necesitó para superar las palabras de quienes se metieron con su cuerpo en su niñez "muchos años de trabajo, de quererme mucho y apoyarme en los que me quieren". Y logró aparcar esos complejos. "Decir que estoy gorda no es un problema para mí. No es una palabra despectiva, ni indica que tengo una enfermedad, como dicen algunos."
El incidente con la agencia, a la que había indicado previamente su estatura, 1,70, su su número de pie y su talla, ha vuelto a despertarle recuerdos muy desagradables. La agencia le dijo que no había ningún problema, comenzó la formación para trabajar en Fitur; pero cuando llegó la hora de ponerse el uniforme, no tenían su talla y fue rechazada. Tenían una talla única
La empresa ha tratado de arreglar este asunto después de que su vídeo en Instagram se viralizara. "Empecé a recibir llamadas de la agencia y de Ifema pidiendo disculpas", ha explicado Alba en Radio Madrid. "La agencia me ofreció volver utilizando un traje negro y en el puesto de información porque, como hay un mostrador, no se vería tanto que llevo un uniforme distinto a mis compañeros." Pero ella no aceptó. "Es otra muestra de diferenciar a alguien por una talla."
Ahora Alba está a punto de estrenar la obra de teatro que dirige. Trata de "la relación tóxica que tiene el ser humano con la Historia, indica. "El ser humano se dedica a derribar al prójimo sin importar su sexo religión, raza u orientación sexual." Dice Alba que la ha escrito canalizando el daño que ha sufrido y llama a una reflexión entre todos.