La explosión del transformador en una cocina fantasma de Chamartín deja sin luz a los vecinos
El incidente solo ha causado daños materiales, pero los vecinos advierten del peligro del local
Bomberos intervienen en el incendio de una cocina fantasma en el distrito de Chamartín / Vía Twitter. @NataliaGarcaSn3
Madrid
La explosión del transformador de una cocina fantasma en la calle Canillas del barrio de Prosperidad, ha dejado sin luz este lunes a numerosos vecinos del distrito de Chamartín. El local, que alberga 38 cocinas industriales y contra el que protestan los vecinos, se instaló hace varios meses en zona para atender pedidos de comida a domicilio.
Las llamas se han originado poco antes de las seis de la tarde y, según las primeras pesquisas, el origen ha sido el estallido de uno de los transformadores de la nave que ha provocado un pequeño incendio, subsanado por lo mismos trabajadores del local. El fuego no ha producido daños en otros inmuebles ni tampoco de carácter personal. Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid se han personado en el lugar pero sólo para comprobar la extinción de las llamas y rápidamente se han marchado.
Aunque no sé han producido heridos y Samur no ha tenido que desplazarse a la zona, los vecinos llevaban meses advirtiendo del peligro de este local. "Esto es sólo el principio de todo lo que puede venir... Un transformador de este tipo tiene que estar en un polígono, no debajo de una vivienda", ha declarado un vecino después del incidente.
Sin respuestas del ayuntamiento
Los vecinos de la zona llevan meses denunciando los peligros y malos olores que supone la instalación de estos locales al lado de sus viviendas. "El incidente no es más que la consecuencia de tener 38 cocinas debajo de nuestra casa, con la potencia que necesitan. Tenemos un cartel de 'Peligro de muerte, alta tensión' al lado de nuestro portal", ha explicado una vecina.
"Hemos escrito varias veces al Ayuntamiento de Madrid advirtiendo del peligro, pero no hemos sido escuchados ni contestados", denuncia. "Espero que esto sirva para que el Ayuntamiento sea consciente de que tener un local industrial en una casa de vecinos es una locura", añade.
