Sociedad
Malos tratos

El juez archiva la denuncia contra las cuatro profesoras de Dos Hermanas

No se ha probado que maltrataran o denigraran a una alumna autista de 7 años

Fachada del centro educativo / Europa Press

Sevilla

El juzgado de instrucción 3 de Dos Hermanas archiva la denuncia contra la directora, la logopeda, la monitoria y la tutora de una niña autista del colegio Cervantes de Dos Hermanas porque no se ha probado que la maltrataran o que le dieran un trato degradante que pudiera menoscabar la integridad de esa menor. La madre de la chica guardó una grabadora encendida en la mochila de la niña donde se escuchaban gritos y palabras despectivas hacia ella. La familia contó que tomaron esa decisión porque la pequeña sufrió dos crisis epilépticas en poco tiempo y tuvo conductas autolesivas entre semana, cuando iba al colegio. Ocurrió en abril de 2019.

El juez Enrique Martínez explica que las expresiones que se oyen en esa grabación no tienen la suficiente gravedad como para suponer un delito. De lo contrario, señala el auto de archivo, serían "susceptibles de criminalización todas las conductas efectuadas en términos de reprobación y castigo" de profesores o padres "en el legítimo ejercicio de sus funciones de educar". Es más, el magistrado incide en que "la patología de la menor en ningún caso la libera de la obligación de obedecer" a los profesores cuando está en el centro educativo.

El magistrado resalta también que las expresiones que grabó la niña se realizan en un ámbito privado de confianza entre adultos sin la presencia de la niña. Aunque no son expresiones afortunadas desde un punto de vista educativo.

El juez argumenta que la niña tuvo dos crisis epilépticas y episodios de autolesiones pero no como consecuencia "exclusiva o excluyente de la conducta de sus profesoras". En todo ello influyó el cambio de aula específica, los cambios de sus rutinas tras el nacimiento de su hermano, la ausencia de su padre que encontró un trabajo fuera o el cambio farmacológico que había tenido.

El auto dice que, aunque nadie lo ha planteado, existen dudas razonables sobre la licitud de la grabación y las consecuencias legales y procesales de todo lo instruido basándose en la misma. También afirma que las "consideraciones e implicaciones éticas y/o morales de este caso resultan humanas, comprensibles y legitimas pero desde la perspectiva penal devienen irrelevantes".

El juez recuerda que las profesoras siempre defendieron que la niña debía estar un centro educativo especial y así se lo manifestaron a los progenitores. "Y la experiencia y realidad material posterior ha demostrado que las querelladas se encontraban en lo cierto dada cuenta de la excelente evolución de la menor desde que en septiembre de 2019 la menor acude al centro educativo especial".

En la grabación se escuchan expresiones como: “Ahí te quedas, ¿te pego?” o “ya se ha trastocao”; también se oye decir “lávate las manos, cochina, que te estoy viendo jugar con los mocos”.

La niña acudía a un aula específica del CEIP Cervantes de Dos Hermanas en la que también están escolarizados otros niños con trastornos del espectro autista y necesidades especiales. Los padres la sacaron del colegio cuando tuvieron conocimiento de esas expresiones.

 
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