Satisfechos por el compromiso, pero críticos por la falta de nuevas obras
Así están los regantes que se beneficiarán de las 4 obras que el Ministerio de Transición Ecológica se compromete a terminar antes de 2027 en Aragón, según se contempla en el Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro que está en exposición pública. Denuncian que esta planificación entierra el Pacto del Agua de Aragón
Sentimientos encontrados entre los regantes ante el Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro (PHDE). Están satisfechos porque contempla terminar las cuatro grandes obras hidráulicas en marcha en Aragón: Almudévar, Mularroya y los recremientos de Yesa y Santolea. Pero, son muy críticos porque descarta el resto de obras de regulación previstas en la comunidad hasta 2027 y no apuesta por los regadíos.
El presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, cree que es un pacto que solo mira por lo ambiental y no por enriquecer la economía de la zona y desecha más de 30 obras de regulación del agua. "Lo único positivo," dice Trillo "es la finalización de las obras 4 obras en marcha", entre las que se incluye Almudévar. Pese a esta buena noticia, el presidente de Riegos del Altoaragón denuncia que "desecha otras 30 obras de regulación que había y lo que está claro es que entierra definitivamente es el Pacto del Agua de Aragón".
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Mularroya, Yesa y Santolea
Otros de los regantes beneficiados con el planeamiento del ministerio para los próximos años: los de la cuenca del Jalón. También están satisfechos porque recoge terminar con las obras de Mularroya, pero también ellos, advierten: hay que ser cautelosos. Según el presidente de la Junta Central de Usuarios del Jalón, Jesús Lamuela, denuncia que "faltan pequeñas infraestructuras que estamos intentando conseguir en la zona del Alto Jalón y somontano del Moncayo”.
En una situación similar están los regantes de Bardenas ante este documento de actuaciones de regulación hasta 2027, que mantiene el recrecimiento de Yesa. Su presidente, José María Vinué insiste “que atiendan nuestra demanda histórica está bien, pero también queremos que se atiendan esas demandas de otras comunidades de regantes porque al final el regadío somos todos y tenemos que defenderlo entre todos”. Los usuarios del embalse de Santolea, que la Confederación Hidrográfica del Ebro se compromete a recrecer antes de 2027, también son críticos. Califican el plan como “muy restrictivo”.