¿Por qué la Cibeles en Madrid?
No es la primera vez que hablamos de ella en este programa. La estatua de la Cibeles que desde finales del siglo XVIII se levanta en el centro de la ciudad se ha convertido e un símbolo, un icono de la capital, casi un talismán. ¿Por qué? ¿Qué hace una diosa frigia, reflejo de una cultura pagana y distante, aparentemente, del cristianismo siendo el símbolo de Madrid?
Madrid
La diosa madre Cibeles, una divinidad que unía la idea de protección, diosa
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nutricia y amparo es uno de los símbolos, por no decir el símbolo, de la ciudad de
Madrid. Nada tiene que ver con su vínculo con el Real Madrid. Además, este
vínculo es muy moderno, de apenas cuatro décadas, ya que en esa misma plaza
desde la de 1960 era el lugar en donde se reunían los atléticos para celebrar sus
triunfos. Pero, dejando de lado estas tribulaciones contemporáneas, la plaza y en
especial la escultura tienen mucha historia.
La estatua de la fuente es una escultura de 1782 esculpida por Francisco
Gutiérrez quien hizo a la diosa y el carro en el que descansa, Roberto Michel (los
dos leones, que no caballos, como en el chiste…) y el adornista Miguel Ximénez.
Todos ellos seguían un diseño previo del gran Ventura Rodríguez.
¿Por qué Cibeles?
Buena pregunta, aunque quizá no sea más que una simple casualidad. No
olvidemos que la escultura estaba pensada para adornar una de las plazas de los
jardines de la Granja de San Ildefonso en Segovia. Con este argumento, pensar
que hay un simbolismo especial detrás de su colocación en el centro de la ciudad,
no sea más que pura especulación. Pero sí, nos gusta especular. ¿Por qué no?
Cibeles es, como hemos dicho antes, la diosa madre por antonomasia del mundo
antiguo. Su arquetipo se asemeja al de otras diosas protectoras como Astarté, Isis,
o Atenea. Pocos saben que debajo del Vaticano, en la catedral de San Pedro, se
conservan los restos del templo romano de Cibeles. ¿Casualidad? No lo creo,
pero, aunque en el caso madrileño, la ubicación de la estatua no fuera el lugar
original, seguro que cuando Carlos III mandó colocarla ahí fue por algo. A ello
tratamos esta nueva sección en el programa.