"Queremos salir de aquí", el grito de los vecinos de San Fernando de Henares afectados por las obras del metro
El alcalde del municipio ha convocado una Asamblea Ciudadana para exigir a la Comunidad de Madrid que tome medidas respecto a los daños causados por las obras de la estación de Metro
El alcalde del municipio visitando las viviendas afectadas. / Ayto. San Fernando de Henares
Madrid
Los vecinos de San Fernando de Henares han vuelto a denunciar, una vez más, la inestable situación que sufren, tanto ellos como sus viviendas, a consecuencia de las obras de la línea 7B del Metro de Madrid. Crujidos, desprendimientos del techo, grietas o movimiento de las casas son algunos de los signos que evidencian la precaria posición que viven día a día los vecinos de este municipio.
Ahora, Francisco Javier Corpa (PSOE), alcalde de San Fernando de Henares, ha convocado una Asamblea Ciudadana el martes 7 de septiembre para demandar al Ejecutivo Autonómico que tome medidas cuanto antes. "Hasta que no me reciba no me voy a mover de ahí (la Puerta del Sol), porque este problema es lo sumamente grave como para que Isabel Díaz Ayuso se lo tome en serio", apuntaba hoy en una visita a las casas de los vecinos afectados.
A la visita también se sumaba Hana Jalloul, portavoz del grupo socialista en la Comunidad de Madrid, quien asegura que los problemas aparecen desde el principio, cuando se crea la estación, ya que "los informes técnicos no se escucharon". Unos problemas, asegura, que "siguen saliendo. Hay casas que ya se están viendo afectadas desde hace 3 años, y otras que seguirán. Probablemente, los bloques que están detrás de estos edificios, el año que viene o en unos meses".
Los vecinos también se han sumado a esta queja e invitan a la presidenta de la Comunidad de Madrid a que visite la zona y las viviendas para que se tomen medidas cuanto antes. "Me gustaría que viniera. Yo le cedo un día para que viva y duerma en mi casa para que sienta esa sensación, porque lo que es es miedo", apunta Eva María, residente de San Fernando. "Todo el mundo quiere que llueva para que se sanee todo, ¿verdad?"- comenta entre sollozos, afectada. "Yo salgo a la terraza porque es mi casa y la de mis vecinos y esto se cae. Es que queremos salir de aquí".
Las obras comenzaron en 2007 bajo el mandato de Esperanza Aguirre para desarrollar la línea 7B de metro y los problemas empezaron en 2008. Pocos años después de su apertura, empezaban a escucharse las primeras voces de protesta de los vecinos, quienes comentaban que habían aparecido grietas en sus viviendas o que las casas se movían. A pesar de que han pasado 14 años desde los primeros incidentes, el tramo se ha cerrado hasta en 7 ocasiones.
La última, desde el 12 de julio de este año, cuando la Comunidad de Madrid iniciaba obras de mejora del metro entre Coslada y San Fernando, volviendo a cerrar el tramo y reabriendo una herida nunca cerrada del todo. Se espera que esta nueva reparación dure hasta el 24 de septiembre.
Desde la Comunidad de Madrid, hace casi año propusieron una comisión de evaluación de daños para tasar las consecuencias e indemnizar a los vecinos, quienes aún no han recibido ningún pago. El Ejecutivo Autonómico achaca los problemas a la inestabilidad del terreno de la zona y no a una mala estructuración del metro. Parches, dicen los que viven ahí, que tan solo alargan un problema sin proponer una solución real, efectiva y segura.
