"Me preocupan los efectos que estos cambios continuos de medicamentos pueden tener sobre mi salud"

Bilbao

Izaro Antxia es una mujer que lleva año y medio interrumpiendo o modificando sus tratamientos hormonales cada dos meses por la falta de medicamentos en las farmacias. A día de hoy, y tras varias terapias intermitentes, usa un spray transdérmico, recetado por Osakidetza, que también está desabastecido. “En 15-20 días el spray se me agotará. Me han dado dos opciones: pagar por un tratamiento similar al que estoy tomando, pero sin receta, o volver a iniciar otra medicación diferente que ya tomé hace tiempo. Esta última implicaría pasar de un spray vía cutánea a unas pastillas”, ha explicado.

A esta falta de stock se suma además el problema económico, ya que los médicos se ven obligados a recetar medicamentos no subvencionados para continuar los tratamientos. “Ahora mismo pago cada mes y medio 1 euro por el spray. Como está desabastecido, la endocrina me ha recomendado un gel, pero sin receta; por lo que pasaría a tener que pagar de 16 a 40 euros mensualmente”, ha añadido.

Y exige una respuesta por parte de la Agencia Española del Medicamento sobre un problema por el que dicen sentirse preocupados: “Yo no tengo órganos sexuales internos que fabriquen esas hormonas, por lo que lo que más me preocupa es los efectos que estos cambios continuos de medicamentos puede tener sobre mi salud”, ha concluido.