Detective privado: "Tenían que llegar a la fiesta ilegal como un turista: ir a la playa y dejarse seducir"

Ibiza

Combatir las fiestas ilegales con detectives privados. Es la medida que ha llevado a cabo este verano el Consell de Ibiza y que se ha saldado, en poco más de un mes, con 29 personas denunciadas y siete fiestas intervenidas.

Un servicio que, desde la máxima institución insular, aseguran que se potenciará de cara al próximo verano.

En este sentido, el detective privado y director de Dectectives Garbo, Juan Cruz, la empresa contratada por el Consell para que los detectives se infiltraran en fiestas ilegales, ha explicado que 'sufrieron' un aluvión de peticiones para trabajar en este servicio en Ibiza, de profesionales y no profesionales.

Cruz, que ha sido uno de los invitados al programa Hora 25 que se está emitiendo este viernes desde Ibiza, ha dicho que "necesitábamos a gente joven y de aspecto que fuera coherente con el tipo de turismo que viene a la isla; gente capaz de integrarse en el entorno nocturno", ha señalado.

Aunque inicialmente hubo controversia con el anuncio del Consell, Cruz ha explicado que la propuesta, desde un principio, fue que participaran "detectives de origen extranjero titulados en España". El objetivo era claro: pasar desapercibido.

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"Tenían que conseguir llegar a la fiesta actuando como un turista más: ir a la playa, cenar y dejarse seducir", ha indicado. "Establecían los contactos a través de las redes sociales o incluso en persona".

En plena pandemia, infiltrarse en estas fiestas ilegales también suponía arriesgarse a infectarse. "Los detectives estaban vacunados o habían pasado el covid", ha especificado el director de la empresa, que no ha querido especificar el salario que cobran. "Normalmente rondan los 2.000 o dos mil y pico euros, pero en esta ocasión era diferente".