Los gases de efecto invernadero, el talón de Aquiles para frenar el cambio climático

Zaragoza

"Siempre se está a tiempo [de frenar el cambio climático], siempre que se tomen las medidas adecuadas; otra cosa es si se están tomando o no; bajo mi punto de vista no se están tomando, sobre todo desde el punto de vista de las emisiones de gases de efecto invernadero, que son los principales causantes de este proceso". Es el análisis que hace Sergio Vicente, investigador del Instituto Pirenaico de Ecología del CSIC y uno de los coautores del último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos de Cambio Climático de la ONU.

Vicente participa esta próxima semana en la Aragón Climate Week, que pretende concienciar a la población aragonesa de la emergencia climática, con charlas, debates y talleres en la cuenta atrás para la cumbre de Glasgow.

Para Sergio Vicente, sí que hay conciencia medioambiental, pero los avances no son suficientes. "Sí que se están haciendo cosas de adaptación al cambio climático, con medidas que a los cambios de usos de suelo, en la mejor utilización del agua, una utilización más eficiente de los recursos en general", explica. Sin embargo, "en el principal aspecto, que son las emisiones, se está haciendo poco".

Emisiones de metano

Por ejemplo, la ganadería industrial: "Es un emisor de metano, un gas de efecto invernadero que se estima que contribuye alrededor de un 25% al calentamiento" y "tiene consecuencias ambientales negativas".

De este modo, este tipo de ganadería "probablemente no sea una de las prácticas más adecuadas para mitigar y adaptarse al cambio climático". La alternativa, dice, es la ganadería extensiva: genera empleo, limpia los bosques y controla el riesgo de incendios. 

Crisis climática, crisis económica

Pero el cambio climático es un problema global, en una sociedad basada en el consumo rápido Parar esta rueda sin hacer cambios en la estructura económica, remarca este experto, es inviable.

"Si paramos el consumo, si paramos la producción lo que vamos a producir es desempleo, crisis económica y a ver quién es el gobernante que se atreve a ello", apunta Vicente.

"La única alternativa es invertir en tecnologías y en sistemas económicos que permitan una economía verde, sin emisiones y que creen empleo" porque "parar las emisiones per se para reducir el cambio climático tendría unas consecuencias económicas dramáticas", continúa.

Fenómenos extremos

El territorio de Aragón está enmarcado en la región mediterránea de este informe de la ONU, que registra un aumento de temperaturas a un ritmo muy superior que la media del planeta y sin cambios en las precipitaciones; un escenario que desemboca en grandes sequías y fenómenos extremos.